El lograr obtener un trabajo puede convertirse en un gran reto, sin embargo, cuando se acompaña nuestro currículum vitae con una carta de presentación persuasiva, las posibilidades de conseguirlo aumentan considerablemente. Este recurso es un as bajo la manga que te extiende una alfombra roja hacia ese puesto anhelado.

Este documento representa la primera imagen que obtendrá el reclutador del postulante. De forma breve pero perspicaz, debes exponer información relevante acerca de ti, tu experiencia laboral e interés por el puesto, dar a entender porqué eres la persona con el suficiente potencial para ejercer el cargo ofertado.

Qué buscan los reclutadores en una carta de presentación

Muy pocas veces los currículos son acompañados por cartas de presentación, y aunque no lo parezca, para algunos reclutadores ésta puede marcar la diferencia entre los candidatos; si llama su atención, el aspirante seleccionado tiene mayor oportunidad de obtener una entrevista personal.

Los reclutadores o jefes de recursos humanos, buscan conocer mejor al aspirante más allá de lo que pueda leer en su CV, qué lo motiva a postularse, cuáles son sus intereses con la empresa, incluso que aportaría a la organización si quedase seleccionado.

Con esta carta de presentación, quien tenga la potestad de seleccionar al personal, se creará una primera opinión del candidato al cargo, negativa o positiva, pero que definitivamente repercutirá en la decisión que éste tome. Estos documentos deben ser claros y transparentes en su contenido, no dar falsas impresiones que lleven al reclutador rechazar de inmediato la postulación.

Presentar una buena carta de presentación y no morir en el intento

Esta carta muestra una imagen del candidato, y la forma en que ésta “se venda” al reclutador tiene que ser atractiva, persuasiva e interesante; para ello, toma en cuenta lo siguiente:

1) Inicialmente, debes especificar tus datos personales como nombre completo y contactos (teléfono o correo electrónico).

2) Luego, saludas cordialmente e indicas a quien va dirigida la carta, por lo que es necesario que tengas información previa de la persona que selecciona así como de la empresa.

3) Lo siguiente es exponer el objetivo de la carta de presentación, iniciando con las razones por las cuales te interesa el cargo, qué te motiva a trabajar en la empresa destacando fortalezas de ésta (cultura corporativa, premiaciones, innovaciones).

4) Ahora debes destacar el por qué eres la mejor opción para el puesto. Describe tus experiencias, conocimientos y habilidades aplicables al cargo.

5) Finalmente te despides, y atrévete a solicitar que consideren una futura entrevista o reunión.

Errores comunes que te llevan a perder tu oportunidad laboral

Al redactar una carta de presentación debemos estar atentos en no cometer errores que puedan generar una imagen errada o falsa de nosotros, así como que ésta se perciba como un “copia y pega”, que lleve al reclutador pensar que se tiene poco interés por el cargo o simplemente no estamos capacitados para ejercerlo.

Uno de ellos es desconocer por completo a la empresa que ofrece el cargo, dando a entender que sólo te postulas por la necesidad de tener un puesto que te genere ingresos y ya, y algo que consideran los seleccionadores de personal, es que el postulante tenga empatía hacia la empresa.

Asimismo, evita presentar una carta genérica, que te limite personalizarla de acuerdo a los requerimientos del cargo o intereses de la empresa. Aunque debes respetar la estructura, procura que este documento se adapte en lo posible a los intereses de la organización.

Que la redacción y ortografía no te falle

Aunque parezca impensable, la redacción y ortografía de una carta de presentación han sido motivos por los cuales muchos reclutadores rechazan inmediatamente la postulación, ni siquiera se molestan en revisar el CV entregado junto con este documento.

1) Cero faltas de ortografía, lee la carta todas las veces que puedas para descartar cualquier error ortográfico o gramatical, y si tienes dudas, utiliza sin pena un corrector ortográfico.

2) No escribas frases muy largas, mientras más breves y claras sean, mejor comprensión y rápida lectura tendrá.

3) Utiliza en la redacción un lenguaje directo, conciso y formal, sin mucho tecnicismo o palabras vagas.

4) No utilices palabras empalagosas o que suenen hipócritas, muestra originalidad y creatividad en el texto, que el reclutador perciba parte de tu personalidad en el escrito.

Como último consejo

Está claro que una carta de presentación es un aval de nuestras capacidades para optar por un puesto de trabajo; es nuestra primera imagen ante un reclutador que aún no nos conoce personalmente. De esta forma, es imperativo insistir en que este importante documento debe estar elaborado con detalle, claridad y precisión.

No debes mostrarte como una persona desesperada por el cargo, que se valga de palabras suplicantes e insistentes que rápidamente aburrirán o molestarán al reclutador. Manifiesta seguridad, motivación y creatividad en lo escrito, llama la atención de manera ingeniosa.

Finalmente, indaga acerca de la empresa como cuál es su filosofía, fortalezas, posicionamiento e incluso puedes averiguar un poco más, y conocer quiénes serán los responsables de seleccionar a los postulantes. Todo ello es válido para demostrar que tienes interés en pertenecer a la organización


FUENTE: BUSCAR EMPLEO

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