Parados de larga duración. Consejos para no decaer en la búsqueda

 

El parado de larga duración es la persona que se encuentra en desempleo sin ser su elección y que en la actualidad representa un porcentaje considerable respecto a la tasa de población activa.

Se considera parado de larga duración a la persona inscrita como demandante de empleo, de forma ininterrumpida, durante un periodo mínimo de 12 meses.

Según datos estadísticos obtenidos a través de los Indicadores de Desarrollo Sostenible, realizados por Eurostat, nos encontramos con la siguiente evolución de Parados de Larga Duración (PLD) respecto a la población activa, diferenciando entre hombres y mujeres desde 2008 hasta 2012, y en función del rango de edad durante el año 2012.

 

2008 2009 2010 2011 2012
Hombres 1,4 3,7 7,1 8,6 10,8
Mujeres 2,9 5,0 7,7 9,5 11,6
<25 25-49 50-59 60-64 Total
Mujeres 32,2 45,8 57,4 58,0 45,6
Hombres 38,6 41,4 54,5 55,4 43,5

Parece que estar desempleado y no encontrar un trabajo pronto o alguna actividad formativa para mejorar nuestro CV, tiene una consecuencia negativa en las personas ya que van perdiendo motivación e interés en la búsqueda de empleo y provoca que se alargue la situación de desempleo.

Los motivos pueden ser varios como una búsqueda de empleo no bien ejecutada, un objetivo profesional no definido, no real o no alcanzable, negativa o imposibilidad de cambio o ámbito geográfico, ocupaciones en retroceso (construcción)…, en definitiva, una dinámica negativa en la que no vemos salida por ningún sitio y no nos permite buscar alternativas que nos haga acceder nuevamente al mercado laboral bien como trabajador por cuenta ajena, bien como trabajador por cuenta propia.

Planificación – Organización – Programación (POP)

Cambiar las dinámicas no es tarea fácil, y menos cuando son negativas, pero a la vez no son imposibles, y nos lo podemos tomar como un reto personal de superación el cambiarlas.

Lo primero que debemos hacer es analizar de forma pormenorizada a:

  • Nosotros mismo, a través de un ejercicio de autoconocimiento (CV, formación, capacidades, conocimientos, redes de contactos, etc.)
  • El mercado laboral, donde tenemos disponibilidad para trabajar (empresas, tendencias, transporte público y privado, nuevas empresas, etc.)
  • El posicionamiento en el mercado laboral, es decir, dónde encajamos en función de lo que ofrecemos nosotros y lo que demanda el mercado laboral

Una vez realizado este análisis y con los datos obtenidos podemos poner en marcha que vamos a llamar POP, que consiste primero en planificar, segundo organizar y tercero programar.

Con la Planificación vamos a establecer un plan para alcanzar nuestra meta (objetivo profesional) y objetivos intermedios que nos vana a permitir alcanzar nuestra meta, como pueden ser formación para adquirir nuevos conocimientos; aprender a afrontar un entrevista de empleo para ganar en confianza ante una situación que suele provocar bastante ansiedad; mejorar y adquirir nuevas capacidades para adaptarnos a un entorno en constante cambio…

Mediante la Organización estableceremos el orden a través del cuál alcanzaremos nuestros objetivos. Investigaremos, por ejemplo, la formación que necesitamos hacer, dónde se imparte, requisitos para acceder, tiempo para realizarla, etc. Igualmente adaptaremos nuestro CV a las posibles ofertas de empleo u organizaciones a las que estemos interesados en presentar nuestra candidatura.

Y finalmente, la Programación en la que distribuiremos el tiempo y días que vamos a dedicar al envío y seguimiento de CV a través de una agenda de contactos que generaremos conforme vamos repartiendo nuestros CV y donde debemos incluir como mínimo la siguiente información:

  • Fecha de entrega del CV.
  • Nombre de la empresa/organización.
  • Persona de contacto (nombre y teléfono y/o email de la persona responsable de la contratación).
  • Datos de interés (información relativa a próximas contrataciones, como por ejemplo, picos de productividad, bajas o vacaciones a cubrir; perfiles profesionales reclamados, requisitos, ETT’s con las que trabajen, etc.).
  • Fecha de seguimiento (establecida en función de los datos de interés obtenidos).

Aunque no siempre será posible obtener esta información, si la poseemos (la información es poder), tendremos un plus respecto a otras personas que se encuentran buscando empleo igual que nosotros.

Así mismo, en la fase de Programación, desarrollaremos otras actividades relativas a aspectos diferentes al CV, como ya hemos mencionado (formación, seminarios, talleres, acudir a citas con orientadores, etc.).

En definitiva, se trata de un sistema cíclico, en el que el proceso se repite de forma continua, pero conseguiremos hacer una búsqueda activa de empleo donde podremos controlar mayor número de variables, optimizar nuestro tiempo y los recursos materiales que dispongamos. Por lo tanto, seremos más eficientes en la búsqueda de empleo.

Agradecimientos al autor Manuel y Jobeeper por su publicación.

Manuel J. González

Orientador Profesional de la Red Andalucía Orienta.

Lic. en Psicología y con formación diversa, haciendo coaching con desempleados

Twitter: @manolo74