En entrevista de trabajo nos preguntan a menudo ¿ por qué debo contratarle a usted? ¿A qué se refieren? Estan demandándonos por algo que todos tenemos pero que nos cuesta detectar y mostrar: los puntos fuertes.

Hemos escuchado muchas veces que nos hemos de vender en un proceso de selección, pero no a todo el mundo le gusta esta expresión porque parece que seamos un objeto o porque hay quién te dice “yo soy como soy, no me tengo que vender”. Curiosamente, hablando con ellos, en ocasiones podemos ver que no se venden porque lo ven mal, pero sí se malvenden, es decir, sí te resaltan lo negativo. Hemos de ser capaces de ver nuestros puntos fuertes como candidatos y poder ofrecerlos y mostrarlos durante un proceso de selección.

” Por qué debo contratarle” es una pregunta realizada para conocer los puntos fuertes del candidato. Los puntos fuertes son aquellos que nos ayudarán a construir una imagen positiva y eficiente del candidato y que permitirán estructurar un discurso visible durante el proceso de selección, sea durante la entrevista, o en el Cv o la carta de presentación, por ejemplo.

Hace un tiempo escribí sobre cómo el técnico de selección construye la imagen del candidato durante todo el proceso de selección. En este caso vamos a ver cómo construimos esta imagen.

Ante todo, hay que valorar nuestra carrera profesional positivamente. Si nosotros no lo hacemos, nadie lo va a hacer. Pensemos qué sabemos hacer, en qué momentos nos hemos sentido orgullosos, qué nos gusta y motiva y en qué somos buenos. En lo que no somos tan buenos, si afecta a nuestro trabajo, como ya he escrito en otros posts, hemos de mejorarlo.

Os lo explico desde la mejora profesional. No puedo explicarlo desde otro lugar. Hemos de intentar superarnos, sin tensiones ni angustia, pero ser mejores (en todos los campos, no sólo en lo profesional) es clave en el ser humano para sentirse orgullosos. Por ello, conozcamos nuestros puntos débiles y trabajemos para que lo sean menos. En el post enlazado podéis ver la importancia de los puntos débiles y por qué hemos de decir alguno cuando nos lo preguntan en la entrevista.

No os podéis llegar a imaginar la de mensajes negativos que escucho de los candidatos o alumnos a los que formo, sobre su propia trayectoria:

  • “No tengo casi experiencia”.
  • “Tengo pocos estudios”.
  • “He estado muchos años sin trabajar”…

Lo curioso es cuando escuchas a muchas personas menores de 25 años diciéndote que no tienen demasiada experiencia, lo que es una obviedad porque no puede ser de otra manera.

Además, muchas veces va asociado a ideas negativas sobre el mercado laboral:

  • No tengo casi experiencia y casi todas las ofertas piden más años de la que tengo.
  • Suelen pedir más estudios de los que tengo.
  • Seguro que no me llaman para la entrevista porque ven que he estado años sin trabajar.

Estas ideas las he analizado en otros posts (ir al enlace de ideas negativas sobre el mercado laboral). Lo que sí está claro que, por ejemplo, hoy en Infojobs, hay 11000 ofertas activas en Barcelona, de éstas, seguro que hay alguna para vuestro perfil, pero evidentemente habrá infinitas más que no cumpláis. Se trata de saber encontrar estas ofertas.

Las ideas negativas no ayudan. Más que pensar en negativo, por qué no pensamos:

  • “La formación que tengo, las ganas de superarme y aprender y mi nivel de compromiso y gestión de recursos seguro que equilibrarán los años sin experiencia”.
  • “Mi amplia experiencia, mi facilidad de comunicarme y de trato y mis conocimientos en idiomas me pueden ayudar. Además, he de pensar en mejorar mi nivel educativo”.
  • “Durante los años de paro, me he formado, he ayudado en el AMPA y he trabajado sin contrato. He seguido en activo a pesar de estar “parado””.

Ésta última frase hace referencia al currículum oculto, del que ya escribí hace un tiempo y que os recomiendo leer porque ayuda a entender cómo recuperar para el currículum actividades extralaborales o laborales, pero sin contrato, y otorgarles un valor.

Estos mensajes en negativo significan que, realmente, lo conceptualizamos o pensamos de esta manera, por lo que lo transmitimos de forma negativa. Intentemos verlo en positivo… y creérnoslo, evidentemente.

Por otra parte, cuando pregunto por qué debo contratarle, en ocasiones,los candidatos dan una información muy vaga o tienen un discurso muy pobre o no saben qué decir:

  • “Soy buen trabajador”.
  • “No sé… en un trabajo, pues hago lo que tenga que hacer”.
  • “Es que hablar bien de mi es muy presuntuoso, ¿no?”.

O sea, hablamos mal de nosotros, en negativo, sin ningún problema, pero a la que nos piden que hablemos en positivo, o nos bloqueamos o nos sabe mal o no sabemos qué decir.

Hemos de construir un discurso positivo sobre nosotros como profesionales. “Venderse” no significa mentir, significa decir tus puntos fuertes y resaltar por qué crees que eres un buen trabajador. Si no crees que lo eres, tienes dos problemas: 1. No eres buen trabajador y es una pena porque uno disfruta mucho cuando se siente bien orgulloso de lo que hace y 2. Nadie te va a contratar. Hay que ver en que se basa uno para pensar eso y mejorarlo (formación, entrenamiento de habilidades… pero el primer paso es llegar a verlo y pararse a pensar el por qué se tiene esta concepción, que ya es mucho).

¿Cómo se crea ese discurso? Primero, con la intención de querer mejorar y ver en qué se es bueno y en qué no. Acto seguido, empieza una fase de análisis y estudio de las competencias, trayectoria profesional y educativa y habilidades. A partir de aquí podemos construir un discurso sobre nosotros que incluya nuestros puntos fuertes.

¿Qué quiero decir con construir un discurso profesional? No es que siempre digamos las mismas frases y contenido allá donde vayamos. Es más bien que sepamos qué palabras clave conforman nuestros puntos fuertes laborales. Son palabras que explican conocimientos, habilidades, capacidades, estudios, experiencias… que creemos que serán positivas y muy a tener en cuenta para nuestra candidatura.

Pasos para construir el discurso y extraer los puntos fuertes:

  • Análisis de nuestra trayectoria laboral. Hay que poner en valor todo lo que hemos trabajado, con y sin contrato, colaboraciones, proyectos personales… Pensemos en qué trabajo estuvimos más cómodo o nos valoraban más y por qué.
  • Análisis de nuestra formación y conocimientos puede que adquiridos de manera no formal y/o autodidacta. No sólo valen los estudios reglados.
  • Ahora es momento de pensar en aquello que realmente hacen referencia en la entrevista de trabajo cuando nos preguntan por nuestros puntos fuertes: nuestras competencias, habilidades o actitudes que nos hacen diferentes y especiales.
    En ocasiones nos preguntan “¿Por qué debemos contratarle a usted? O nos preguntan por los puntos fuertes. No se refieren sólo a conocimientos, estudios, experiencia (una persona me dijo una vez como punto fuerte su larga experiencia, pero un anterior entrevistado tenía aún más años trabajados) … se refieren a lo que nos hace únicos.
    Si no sabéis qué decir, os recomiendo que visitéis el post de listado de competencias y habilidades. Así podéis escoger fácilmente aquellas que creéis que forman parte de vuestros puntos fuertes… y también os sirve para las que son puntos débiles.

Una vez conseguido este análisis, ya podéis elaborar un discurso. Incluso podéis escribir un perfil profesional a modo de resumen de vuestra trayectoria y seguro que responderemos de forma más correcta a la pregunta ” por qué debo contratarle”.

Finalmente, sólo falta la actitud de venta. Pero para que esta suceda, primero hemos de conocer “el producto”. No se puede defender o vender lo que no se conoce. Primero hay que conocerse y detectar los puntos fuertes que se tienen para un trabajo. Después, se trata de tenerlos muy claro y saber mostrarlos. No hace falta ser un comercial agresivo. Se puede vender muy bien desde la timidez… mientras que se conozca el producto.

También se requiere la actitud de venta para decidir qué puntos fuertes digo para una oferta de empleo y cuáles no, porque no sean necesarios. Es lo he comentado en otras ocasiones sobre adaptarse a la oferta.

Espero que ya tengáis vuestros puntos fuertes bien detectados y que sepáis qué contestar cuando os pregunten por qué debo contratarle a usted..

… Pues eso..¿ por qué debo contratarle?

 


 

AGRADECIMIENTOS A FRANCESC GÉLIDA @candidatoidoneo

FUENTE: EL CANDIDATO IDÓNEO

VER + EN: http://elcandidatoidoneo.com/puntos-fuertes-del-candidato/