Como dijo Seymour Papert, creador de Lego,”el mejor aprendizaje tiene lugar cuando los niños se involucran y se hacen responsables de su proyecto”.

En un post de hace ya bastante tiempo conté cómo abordaban en un colegio inglés un proyecto para niños de 7 años, y cómo se fomentaba el espíritu emprendedor. Afortunadamente estoy encontrando iniciativas en esta línea en España, que ojalá se vaya popularizando e introduciendo de forma genérica en los colegios españoles.

Desde una baldosa que emite sonido cuando cae basura sobre ella, o el “espantacoches” que evita accidentes en las carreteras, son varias las ideas que han surgido de niños de 10 años del Colegio Valdefuentes de Madrid, dentro de un programa piloto para mejorar y desarrollar las capacidades de emprendimiento.Se trata de una iniciativa apoyada por el centro con la ayuda de la Fundación Créate.

Incluso a estas edades, el fomento del emprendimiento no se trata sólo desde la vertiente creativa, sino sobre todo desde el proceso para que dichas ideas se puedan convertir en realidad, pasando por la conceptualización de las mismas y su exposición, incluyendo sencillos planes de negocio. Y es que a veces confundimos niños creativos e imaginativos con niños emprendedores, y no es lo mismo. De hecho, según otro de los proyectos pioneros en España sobre emprendimiento desde la escuela, Llaves para educar, plantean que hay cinco áreas del talento emprendedor en las que se debe formar a los niños:

  1. El valor ético/social del proyecto.
  2. La comunicación, la venta del proyecto.
  3. El trabajo en equipo.
  4. La automotivación.
  5. La creatividad.

Como se puede ver, la profundidad de estas iniciativas va mucho más allá de lo que es el emprendimiento en sí. Se trata de que los niños tengan un espacio donde puedan desarrollar las inteligencias múltiples dentro del entorno curricular estándar, y no fuera de horas lectivas, como ocurre ahora cuando los padres tienen una cierta sensibilidad a estos asuntos y les completan el horario, ya de por sí cargado, con eventos y actividades extra.

Hay diversas formas de plantearse introducir la visión emprendedora en la mente de los niños. El programa Niños Emprendedores se basa en un concurso en el que niños de entre 7 y 16 años deben desarrollar su idea de principio a fin. Otra opción es el formato de campamento de verano, como propone Emprende Kids, donde en un entorno natural ofrecen a los niños lo que ellos comparan con un “cinturón de carpintero”, el aprendizaje de una serie de habilidades que les serán útil sea cual sea el entorno personal o profesional en el que se mueven.

Para inculcar el emprendimiento en niños se requiere una actitud proactiva por parte de los directores de los centros educativos para ir introduciendo en la rutina de los mismos los métodos que estas iniciativas apoyan. Como padres y educadores no debemos esperar a un cambio de legislación a nivel estatal para probar a modificar algo en alguna asignatura, en esta línea. Si bien puede haber barreras de implantación, creo que la mayor es no empezar a hacerlo. Curiosamente, puede ser la falta de emprendimiento la que lleve a no probar la formación en emprendimiento para los niños.

Yéndonos a la faceta más tecnológica, no quería cerrar sin recordad iniciativas orientadas a la tecnología como base para la creación y el emprendimiento en niños, como los cursos de robótica, realidad aumentada y programación del programa Talentum Schools promovido por Telefónica, o los cursos intensivos delCampus Tecnológico Innovae, por citar un par de ejemplos.

Esperemos que en pocos años no tenga sentido escribir sobre estas iniciativas porque ya sean totalmente comunes.

Imagen Elemenous

FUENTE: http://blogthinkbig.com/