El acceso a las ofertas de trabajo es cada vez más complicado. Entre los motivos que nos encontramos está el que, evidentemente, hay menos ofertas, pero también cada vez que estas ofertas son más invisibles o se difunden menos. Por eso es importante estar muy activos/as en nuestro proceso de búsqueda de empleo, y una de las maneras es teniendo una buena red de contactos. Cuando hablamos de red de contactos nos estamos refiriendo a todas aquellas personas de nuestro entorno (familiares, amigos, antiguos compañeros/as de trabajo y estudio, antiguos jefes/as, incluso vecinos/as) que, sabiendo que estamos buscando trabajo, pueden pensar en nosotros/as cuando se enteren de una oferta en la que podamos encajar.   Y esta frase tiene varios puntos importantes a tener en cuenta:

Todas aquellas personas de nuestro entorno (familiares, amigos, antiguos compañeros/as de trabajo y estudio, antiguos jefes/as, incluso vecinos/as).Como veis, el espectro de personas con las que podemos contar es muy amplio, pero no debemos perder de vista que deben ser personas con las que tengamos un contacto activo. Antes de nada, tenemos que pensar qué personas de nuestro entorno pueden ser las que más adecuadas puedan resultar o que nos pueden aportar más, en el sentido de, por ejemplo, que se dediquen a algo relacionado con el empleo o la gestión de ofertas directamente, o que estén trabajando en una empresa o sector que sea de nuestro interés, o simplemente personas que sean más afines a nosotros/as. Para ello lo mejor es hacer una lista diferenciada (por ejemplo, familia, amigos/as y conocidos/as) y a partir de ahí ir reflexionando sobre aquellas personas con las que ya tengamos contacto o sea factible retomarlo. Tened en cuenta una cosa, y es que  el objetivo no es crear un contacto forzado, no es llamar por teléfono y decirle “oye, Fulanito, que soy Menganito y hace mucho que no trabajo, si te enteras de algo me avisas”. Esto no sirve para nada. Si hay que retomar el contacto, hay que hacerlo con interés en la persona y, sobre todo, sin exigencias.

Sabiendo que estamos buscando trabajo. Hay personas a las que les da cierto reparo hablar de que están en desempleo, y esto no tiene porqué ser así ni darnos vergüenza. Desgraciadamente el desempleo está a la orden del día y muchas veces cuantas más personas estén al tanto de si estás buscando empleo mejor, pues pueden ser para ti una gran fuente de información. La red de contactos no tiene porqué ser sólo personas con posibilidades de contratar, sino cualquier persona que se pueda enterar de una noticia y te la pueda comentar: ¿cuántas veces se nos escapa información sobre empresas que van a abrir o que van a contratar? Esto es normal, nadie está al 100% informado/a ni puede acceder a todas las noticias, por eso tener esa red de contactos nos va a facilitar el acceso a la información. Pero para ello tienen que saber que estamos en búsqueda activa de empleo.

Pueden pensar en nosotros/as cuando se enteren de una oferta que me pueda interesar. Y esta parte es de las más importantes y por lo general la que menos cuidamos. No es igual buscar trabajo de ingeniero/a que de peón/a de industria, y eso hay que dejarlo claro. Cuando queremos que alguien que se entere de una oferta pueda pensar en nosotros/as es porque va a ser una oferta en la que podemos encajar, por eso es importante dejar claro qué tipo de trabajo estamos buscando. Nunca vas a buscar de cualquier cosa, porque ni tú ni yo ni nadie puede trabajar de cualquier cosa. Para cada puesto hay unos requisitos, unos perfiles y unas exigencias que van a marcar quiénes van a ser los/as posibles candidatos/as. Por eso, clarifica qué trabajo buscas y, si en tu entorno se enteran de una oferta de eso, que te puedan avisar. Crear una expectativa sobre un trabajo en el que no tienes posibilidades reales de ser seleccionado/a es sumar una frustración más al ya de por sí frustrante proceso de búsqueda de empleo.

Si trabajas estos tres aspectos podrás crear una red de contactos activa, útil y dinámica, que te aporte y, por supuesto, a la que tú puedas aportar, pues la información va a ser bidireccional, y si una empresa te contrata, también va a salir ganando contigo como buen/a profesional que eres, ¿no? Así que trabaja tu red de contactos, retoma antiguo contactos, reactiva tu vida social y date a conocer, sólo así podrás acceder a ese 80% de ofertas que permanecen ocultas.


Artículo elaborado por el equipo del Programa de Empleo de Fundación El Tranvía

fuente: https://elblogdelinaem.wordpress.com/2015/10/29/la-red-de-contactos-y-la-busqueda-de-empleo/