Un informe de la Fundación BBVA y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas advierte de que, de aquí a diez años, los jóvenes con baja cualificación sólo podrán optar a un 2% de toda la oferta laboral y reclama políticas que mejoren la formación para evitar situaciones de exclusión social.
Que la formación es clave para acceder a mejores empleos, ya lo sabíamos. Pero este estudio de la Fundación BBVA va un paso más allá. Según el informe «La formación y el empleo de los jóvenes españoles. Trayectoria reciente y escenarios futuros», elaborado en colaboración con el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas, el mercado laboral expulsará literalmente a los jóvenes españoles con baja formación.

El proceso se irá dejando notar a lo largo de los próximos años, hasta el punto de que, a una década vista, sólo tendrán trabajo los jóvenes más cualificados. Y con ello, advierte el informe, se acrecentarán las desigualdades laborales que se han observado durante esta crisis. Y eso a pesar de que, debido a la evolución geográfica, los jóvenes de la década que viene dispondrán de más posibilidades de empleo que los actuales, ya que en diez años habrá que cubrir en España 7,6 millones de jubilaciones.

El documento subraya que, ya hoy, un joven con estudios universitarios tiene un 13% más de posibilidades de encontrar un empleo que otro que sólo disponga de los estudios básicos. Aunque la carrera no es lo único. Las empresas valoran cada vez más las competencias adicionales, como el dominio de idiomas, que puede incrementar en hasta otro 13% más las opciones de conseguir un puesto de trabajo.

Dentro de diez años, los jóvenes que busquen un trabajo se enfrentarán a un escenario laboral todavía más competitivo. Por sectores, el de los servicios, y especialmente los de carácter privado, incrementará notablemente su peso y siete de cada diez nuevos puestos que se generarán serán de alta cualificación: directores y gerentes, técnicos y profesionales científicos, investigadores, intelectuales y profesionales de apoyo. El 60% de esos empleos serán para trabajadores con educación universitaria o de Formación Profesional Superior, mientras que los aspirantes de los niveles educativos más bajos apenas podrán optar a un 2% de toda la oferta laboral.

Con respecto a esto último, el informe alerta de que «sin políticas ambiciosas y efectivas para mejorar la formación y empleabilidad de los jóvenes menos preparados, sus riesgos de exclusión social y laboral son elevados y lo serán aún más en el futuro».

FUENTE: PORTALPARADOS.ES