Nos hemos dado cuenta que las grandes ONGcontinuamente apoyan sus campañas en distintos vídeos con el objetivo de transmitir diversos mensajes pero que, en cambio, las pequeñas apenas hacen uso de este recurso. Por esto, consultamos a nuestro equipo asesor y estas fueron sus respuestas:

¿Creéis que el uso de contenidos multimedia es una forma eficaz de transmitir un mensaje? ¿Por qué?

Todos nuestros asesores coincidieron en un rotundo sí: algunos, más decididos, no le ponían ninguna pega. John Wood afirmaba que, efectivamente, los datos de viralización del contenido audiovisual eran mucho mayores que los de otros medios; y otros, insistían en la eficacia de los contenidos multimedia siempre y cuando el contenido sea el adecuado.

“El medio es el mensaje”, nos cuenta Marc Masmiqel Mendiara, es un concepto que sigue vigente desde que lo enunció Marshall McLuhan y señala que la eficacia no depende del medio sino del uso que se haga de él. Así, “la eficacia en cualquier medio depende de una serie de conceptos anidados en las características de la comunicación humana”, por lo que el contenido multimedia sí puede ayudar, pero siempre y cuando no nos olvidemos del motivo y desarrollemos un buen trabajo de contenido y comunicación.

Por último, los asesores comentan, en general, que más que hacerlo más eficaz, lo que hace es que los nuevos contenidos multimedia amplían el abanico de llegada del mensaje.

¿Creéis que es preferible a otros medios? En ese caso, ¿para la consecución de qué objetivos?

Nuestra asesora Marilene Schmidt insiste en que no hay un medio que se imponga sobre otro ‘per sé’ sino que hay que atender a los objetivos del mensaje. Ella cree que para una ONG, un audiovisual bien hecho puede ser de gran utilidad a la hora de transmitir una información clara sobre, por ejemplo, el trabajo que una ONG realiza en terreno obteniendo un impacto en el público objetivo mucho mayor. Por otro lado, Luis Larrión Carretero considera, por ejemplo, que los medios audiovisuales son preferibles para contenidos cortos, ligeros y directos.

En general, los otros asesores inciden en que más que preferible, se trata de medios complementarios y que son ‘ideales para sensibilizar’. Es decir, los asesores consideran que si el objetivo es sensibilizar sobre una campaña, por ejemplo, para recaudar fondos un medio con contenido multimedia es idóneo.

Por último, es interesante la aportación de John Wood en la que expone su opinión sobre que, a veces, una imagen es suficientemente eficiente y ‘en términos de tiempo y coste de producción es mucho más rentable y efectiva, sobre todo si en la estrategia de comunicación hay pactadas pautas sobre perchas informativas’

¿Qué es mejor: contenido emocional o racional?

Asesores como Marilene Schmidt o Luis Larrion Carretero defienden que el contenido emocional es ‘*garantía de ética a la hora de transmitir información*’ pero que, a la hora de sensibilizar es un ‘*elemento necesario*’. A este respecto, Ingrid de la Rosa nos envía este post de microdonativos.com:“Claves del éxito en 5 campañas de captación de fondos”

Pero, por otro lado, Marc Masmiquel Mendiara nos ofrece una respuesta diferente. Él cree que ambos se han de mezclar: primero el emocional y luego el racional. Nos cuenta que ya N. Chomsky planteó este problema sobre medios de comunicación y propaganda en su libro ‘Ilusiones necesarias’ y nos ilustra con un ejemplo hipotético (el cual cito textualmente): “Un hipotético comercio decide apoyar a una ONG, cosa muy loable. Para ello lanza un mensaje a sus clientes para que apoyen el negocio y por ende a la ONG. Ese mensaje puede comunicarse de muchos modos, el modo que sea más testimonial, puede interpelar más empatía, emociones y reacciones. En este caso un vídeo ayudaría. Pero si no se da toda la información de un modo deontológico y serio es posible caer en dramatismos, o exageraciones, o tremendismos. Y si además de oculta información es posible contar sólo parte de la verdad… y ese es el peligro, que puede ‘venderse la moto’ de excelencia, cuando en realidad se oculta una situación no tan publicitable”.

Por esto, nuestro asesor considera que siempre que haya un equilibrio entre información, fuentes de verificación y contenidos emocionales, dejando de lado la manipulación y dotando de contenido real a las campañas que se hagan, el mensaje llegará claro a sus receptores y será eficaz y ético.

¿Crees que las ONG más pequeñas deberían usarlo también? ¿Por qué?

Otros asesores como Luis Larrion Carretero inciden en que aunque es cierto que las ONG más pequeñas no tienen los mismos medios que las grandes para enormes e impactantes campañas multimedia, utilizando el ingenio, gestionando correctamente los pocos recursos de los que dispongan (móviles, programas de edición sencillos y canales de comunicación accesibles como las redes sociales) y, en palabras de Marilene Schmidt, una adecuada ‘idea impacto’ puede producir mucho beneficio.

Aquí os dejamos algunos ejemplos de vídeos promocionales de ONG grandes y pequeñas, como demostración de que todo es proponérselo:

Amnistía Internacional España: Amar no es delito

Asociación Parkinson Gandía

Si tienes alguna duda para crear tu vídeo ¡Consulta a nuestro equipo asesor! En caso en que quieras contar con un voluntario o voluntaria que te ayude a realizarlo, publica tu solicitud en Hacesfalta.

fuente: http://www.solucionesong.org/posts/1150