Cuando empiezas tu propio negocio la gente te avisa de cuán difícil es sobrevivir para una nueva empresa o que estás renunciando a la estabilidad. Pero nadie te avisará de una de las partes más duras de ser emprendedor, y es que trabajar para uno mismo puede ser muy, muy solitario.
Trabajar para uno mismo puede hacerte sentir muy pero que muy solo, pero no tiene por qué.
Han pasado ya unos años, pero aun recuerdo mi primera semana como emprendedor. Había dejado mi trabajo y una oficina abarrotada para trabajar en casa como contratista independiente. Estaba emocionado por ser mi propio jefe. Pero cuando me senté en mi apartamento mirando al ordenador, parecía todo muy… silencioso.
Me tomó mucho tiempo y experiencia aprender que estar solo como emprendedor no significa necesariamente estar aislado. De hecho, tú y tu negocio estaréis mucho mejor si, de hecho, no lo estáis. Aquí tienes cómo:
1. No dejes que tu negocio absorba tu vida social
Cuando llevas tu propio negocio, especialmente los primeros días, puede parecer que no tienes otra opción que trabajar prácticamente todo el tiempo. Este tipo de idea puede ser necesaria ocasionalmente; si intentas ajustarte a un día concreto para lanzar un producto, por ejemplo. Pero si rutinariamente dejas de hacer otras cosas porque trabajas cada noche y cada fin de semana, debes ajustarte un poco. Este tipo de horario no es sostenible. Lo sé, lo he probado.
2. Llega a otros emprendedores
Algunas veces estarás solo porque estás literalmente solo, pero porque esa es la naturaleza de tu rol como fundador de una empresa. Todo el mundo en tu empresa confía en ti para solucionar problemas que no pueden, y tú dependes de ti mismo.
Puede que no tengas en tu organización a nadie que lo entienda, pero fuera de tu empresa hay mucha gente que sí lo hace. Así que conecta con otros emprendedores de tu comunidad. Ve a eventos para emprendedores. Nada mata más la soledad que hablar con alguien que se siente igual.
3. Sal de tu industria
No importa en qué industria estás, te garantizo que tiene una asociación comercial. Únete a ella y haz acto de presencia en conferencias, voluntariamente si puedes, y busca oportunidades para conocer a gente de otras industrias en desayunos o cenas. Esto no solo hará que dejes de sentirte aislado, sino que directamente ayudará a tu negocio porque ganarás visibilidad y credibilidad en tu campo.
4. Busca oportunidades para hacer negocios en persona
Solía entregar artículos en mano a mis editores. No tienes por qué ir tan lejos, pero busca cada oportunidad para conocer a tus compañeros, compradores y cualquier persona importante en tu negocio cara a cara. Esta es otra técnica anti soledad que beneficiará directamente a tu negocio. Cuanto más a menudo te cites con la gente cara a cara, más se acordarán de ti cuando necesiten hacer otra transacción.
5. Enseña
Si sabes suficiente como para empezar tu propio negocio, entonces tienes conocimiento útil que compartir. Mira a tu alrededor y busca escuelas de adultos, universidades, institutos, programas de mentoring y otras oportunidades para enseñar a los demás lo que has aprendido. Estarás ayudando a tus estudiantes con información que puedan usar, y haciendo algo que te hará sentir bien a la par.
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