Parece que hoy en día el éxito para una startup consiste en primero conseguir inversores (lo que se conoce como “levantar una ronda”) y luego en vender la compañía en poco tiempo por una buena cantidad de millones… y mucha gente se mete en este camino sin entender muy bien qué opciones tiene y sobre todo, sus implicaciones.

Con esta idea en la mente quería compartir mi punto de vista y experiencia sobre el tema, e intentar comparar los dos extremos que existen en cuanto a financiación de una startup (aunque realmente existen muchas opciones intermedias, tal como hablamos en ¿Dónde, cuándo y cómo buscar inversión para mi startup?, e incluso combinaciones de ellas). Yo en otros negocios he hecho bootstrapping, pero en esta ocasión y dado lo ambiciosos que somos con Startupxplore, hemos buscado inversión externa (¡pronto os presentaré a nuestros inversores!).

En cualquier caso, lo primero es quitarse complejos de encima, y ser sincero con los motivos que te llevan a crear tu compañía… ya que para que la decisión tenga éxito es importante saber dónde te metes y sobre todo, tener claro qué quieres ser “de mayor”.

Simplificándolo mucho podría incluir una de las dos siguientes opciones:

1. VIVIR BIEN

Si lo que te llama es montar lo que se llama un negocio de estilo de vida, en el que seas tu propio jefe, ganes un buen dinero y puedas dedicarte a lo que te gusta, seguramente no deberías buscar inversores por los motivos que veremos a continuación.

Menos riesgo, menos recompensa potencial

2. SER RICO

Si eres ambicioso y quieres crear una gran empresa que deje una gran huella, que crezca rápido y donde puedas acabar ganando mucha pasta, o llegar a ser el próximo Mark Zuckerberg seguramente necesitarás mucho capital para crecer rápido.

Más riesgo, recompensa potencial más alta

En cualquier caso ten en cuenta que una cosa no excluye a la otra, y que muchas compañías empiezan financiando su propio modelo de negocio (ya sea mediante fondos propios o boostrapping) hasta que consiguen validar el modelo de negocio y demostrar tracción, y luego buscan inversores (y seamos realistas, va a ser complicado: según la Kauffman Foundation menos del 1% de las startups consiguen financiación de fondos de VC)

que una compañía no haya conseguido inversión no quiere decir en absoluto que no pueda acabar creciendo muchísimo o siendo comprada por Google (el sueño húmedo de muchos emprendedores). Basta con pensar en compañías como GithubBehanceTechCrunchEnvatoBlogger (vendida a Google) para quitarse muchos complejos.

Startups que bootstrapean su negocio

La idea es financiar la compañía con nuestros propios recursos (ya sea fondos propios, el dinero que ganemos en otras actividades…) hasta que seamos capaces de que los ingresos de la startup la hagan auto-sostenible.

Pros:

  • Control absoluto sobre todas las decisiones sin intervención externa​
  • Presión en crecimiento y fechas interna  y controlable por los fundadores
  • Se puede compatibilizar con un trabajo (al menos al principio mientras se explora el negocio)
  • La escasez de fondos hace que nos focalicemos en lo importante
  • Estupendo para validar el modelo de negocio al principio
  • No existe una obligación de que al final haya que vender la compañía o hacerla crecer muy rápido para dar salida a los inversores
  • Indicado para negocios donde existe una barrera de entrada para los competidores

Contras:

  • Crecimiento más lento (potencialmente) por la carencia de suficiente capital
  • Dificultad para ejecutar modelos que no son rentables desde el momento inicial
  • No existe un grupo externo de personas que nos ayude a tomar perspectiva y nos aporten valor
  • Existe mucha presión por facturar lo antes posible, lo que a menudo hace que no podamos actuar a más largo plazo
  • La escasez de capital complica prácticamente todo: reclutar al equipo, las acciones de marketing…etc
  • El capital marca la velocidad a la que podemos ir, lo que significa que es posible que la competencia nos adelante.

Startups apoyadas por inversores

Se trata de buscar una inversión que nos permita acelerar el crecimiento de la empresa y hacer partícipes de la misma (accionarialmente hablando) a fondos de inversión de venture capital o business angels que nos apoyarán con su capital, red de contactos, experiencia…etc.

Pros

  • Disponibilidad de capital para poder crecer más rápido y expandirte.
  • Contar con el apoyo y experiencia de un grupo de inversores que a menudo conocen mejor que tú el sector y que han hecho el mismo camino (o han apoyado a los que lo han hecho)
  • Acceso a una red de contactos de los inversores amplia y de alta calidad (no sólo importante por conseguir nuevos inversores, sino clientes, empleados, partners…)
  • Posibilidad de ejecutar modelos de negocio donde, aunque exista alguna rentabilidad desde el principio, sea necesaria cierta escala para conseguir grandes retornos o donde las inversiones necesarias sean altas.
  • Capacidad para montar equipos más grandes y salir antes a nuevos mercados, generando barreras de entrada a futuros competidores

Contras

  • Pérdida parcial del control de la compañía a nivel accionarial y en la toma de las decisiones “importantes”.
  • Máxima sensación de urgencia en cuanto a que un grupo de personas han confiado su patrimonio para que tu empresa crezca rápido
  • Si al final las cosas van bien en lugar de poseer el 100% del pastel tendrás un porcentaje menor
  • Si te equivocas de inversores o no estás cómodo con ellos vas a tener que “aguantarlos” durante mucho tiempo.
  • Presión para cambiar de rumbo si los inversores no comparten tu visión sobre el futuro de la compañía.
  • Pérdida de foco y de tiempo en levantarrondas de inversión y no en buscar clientes.

Conclusiones

Quizás a alguno le llame la atención que no mencione cosas como mejores salarios para el fundador… pero es que ningún inversor te va a dar dinero para que te pagues mejor (aunque sí deberías cobrar lo que necesites para vivir). Recuerda que en tu objetivo es ganar dinero haciendo cada vez más valiosa tu empresa y no pagándote un buen salario.

Pero en cualquier caso, tanto si vas a buscar inversores como si no, recuerda que la inversión no es un objetivo en si mismo, sino una herramienta que te debe permitir alcanzar tus objetivos (alineados con tus expectativas):

El objetivo de una startup no es convencer a los inversores de lo estupenda que es su empresa sino persuadir a los clientes de lo genial que es su producto

Autor del arículo (publicado originalmente en su blog):

Javier Megias

por Javier Megias, CEO y cofundador de startupxplore.com

FUENTE: http://www.eureka-startups.com/