En un mercado globalizado, cada vez son más las startups que nacen con la internacionalización en su ADN. En muchas ocasiones las crisis, si sabemos aprovecharlas, pueden generar grandes oportunidades. Si ya eres empresario, o pretendes emprender a corto plazo, te damos 10 consejos para que expandas tu negocio con éxito:
- Escoge el camino internacional más fácil: Para ello será mejor comenzar tu expansión internacional en países culturalmente más afines. Es más fácil comprender la idiosincrasia de un país latinoamericano, y por tanto, sus necesidades, que comenzar arriesgando en un país asiático, mucho más alejado de la cultura y comportamientos del mercado que conoces.
- Comienza internacionalizando desde dentro: Cuenta con un equipo que conozca las particularidades culturales y económicas del país en el que queremos aterrizar. Si tienes personal originario del país al que te diriges, mucho mejor. También es muy importante que el equipo se sepa defender en varios idiomas, como mínimo en inglés.
- Identifica tus oportunidades de negocio: ¿Cuál es el momento más idóneo para expandirte? ¿En qué localidades o ciudades te interesa comenzar y en cuáles no? ¿Realmente tu producto o servicio tiene oportunidades de negocio y liderazgo frente a los competidores ya establecidos? Si sabes gestionar cada oportunidad, comenzarás con buen pie tu internacionalización.
- Detecta las necesidades del mercado: tienes que conocer bien las necesidades específicas del país al que te diriges, para adaptar y presentar tu producto de forma que resulte atractivo en ese mercado. Para ello debes definir los más concreto posible a tu target internacional.
- Invierte en marketing y comunicación: una vez tengas localizado perfectamente el target al que te quieras dirigir, deberás diseñar e invertir en una buena estrategia de marketing para llegar a los futuros consumidores de tu producto.
- Busca buenos partners: si consigues aliarte con socios estratégicos, afianzarás y acelerarás tu expansión internacional. Un buen partner te puede ayudar en la implantación de tu producto en el nuevo mercado y te puede facilitar la consecución de nuevos recursos, o el acceso a una red de contactos dentro del sector que te interese.
- Generar una buena cartera de distribuidores: debemos ser muy rigurosos escogiendo a nuestros distribuidores, ya que serán la cara que defienda la marca en los punto de venta y que se encargue de la correcta implantación territorial. Si sabemos cuidar las relaciones con nuestros distribuidores, nos ayudarán a conocer mejor el marcado y comprender cómo orientar o reorientar las campañas.
- Crea un detallado estudio económico: es imprescindible hacer un estudio financiero pormenorizado que nos permita exportar con cierta confianza en los resultados. Debemos tener en cuenta en todo momento el riesgo país, las divisas, aranceles, etc… Ya que lo habitual es experimentar un crecimiento lento, debemos marcarnos objetivos a medio plazo, y para ello será necesario una importante inversión inicial.
- Arriesga con cabeza: valorar siempre todos los riesgos existentes y considera en todo momento el peor resultado posible para tomar la mejor decisión.
- Aprovecha las ventajas de un mundo globalizado: gracias a la red, y más concretamente a las redes sociales, estamos más conectados que nunca. Aprovecha las ventajas de las nuevas tecnologías para mostrar una imagen de marca internacional, globalizada y unificada.
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