A pesar de cumplir los requisitos solicitados por las empresas, encontrar trabajo a partir de los 45 años puede ser una tarea difícil. Al menos en España, donde la elevada tasa de paro de este colectivo todavía es un claro indicador de esta dificultad. Además las estadísticas señalan que un 45% de los desempleados registrados, mayores de 45 años, lleva más de 2 años en el paro.
En una encuesta realizada por Infojob el pasado año, se recogía que el 96% de los candidatos mayores de 45 años creen que las empresas tienen importantes reticencias a la hora de contratar a perfiles de su edad. La prueba de estas reticencias, según la mayoría de los encuestados, era que su perfil encaja al 100% con los requisitos solicitados y aun así no los llaman. Un 26% de los encuestados afirmaba que el motivo de descartarlos en procesos de selección es que en las entrevistas finales las empresas les habían comunicado que se habían quedado con un perfil más joven.
Sin embargo actualmente parece que la tendencia está empezando a cambiar. Según los últimos datos registrados por el SEPE, en España hay 3.720.297 demandantes de empleo registrados en las Oficinas de los Servicios Públicos de Empleo, de los cuáles, 1.788.393 son mayores de 45 años. A pesar de que esta cifra es muy elevada, ya que representa un 48% del total, las estadísticas más recientes también reflejan un dato positivo, y es que el número de parados registrados, pertenecientes a este colectivo, ha sufrido un descenso del 4,9 % en el último año.
En un artículo publicado en “El Economista”, Juan San Andrés, experto en productividad y factor humano, explica que «esta bajada muestra cómo las empresas están cambiando su mentalidad a la hora de contratar y vuelven a valorar la experiencia de un colectivo de trabajadores que aporta una alta motivación y un fuerte compromiso con la compañía a la vez que desempeña sus labores con una mayor autonomía«.
Aunque las jubilaciones anticipadas y los ERE fueron las principales herramientas para ajustar plantillas durante la crisis, ahora parece que se da un renovado interés por las cualidades y capacidades específicas que aporta el colectivo más senior.
¿Cuáles son las razones principales que valoran las empresas para contratarlos?
Tienen más experiencia. Tener profesionales experimentados en la plantilla permite a los jefes ahorrar parte del tiempo que emplean en su supervisión. Los trabajadores de este colectivo, en general, tienen una curva de aprendizaje muy rápida ya que proceden de otras empresas donde les han formado.
Tampoco hay que olvidar que estas personas han adquirido a lo largo de los años importantes destrezas y habilidades. Además, normalmente poseen un mejor control emocional ante ciertas situaciones, esto les puede ayudar a tomar decisiones en situaciones complicadas que tal vez, otras personas no las podrían tomar.
Los sueldos se han adaptado al mercado actual. Una de las motivaciones más importantes para las empresas es que los sueldos de los seniors se han reducido entre un 25% y un 40%. Además de que existen nuevos marcos legislativos de contratación que favorece la inserción de dicho colectivo.
Mayores y mejores redes de contacto. En un mundo interconectado las empresas valoran cada vez más las redes de contacto que, en el caso de este colectivo, suele ser mayor y de más alto nivel jerárquico que la de otro tipo de trabajadores. Pueden tener una red de contactos que han ido creando a lo largo de su carrera profesional, que puede ser muy útil para la empresa para tener nuevas relaciones con nuevos proveedores, clientes, etc e incluso para conocer mejor a la competencia.
Menor rotación. Los trabajadores mayores de 45 años son más realistas en cuanto a sus expectativas de futuro, no aspiran a ascensiones ambiciosas y rápidas en la empresa, sino que son más estables y leales, por lo que su nivel de compromiso es más elevado. Cuando estos profesionales consiguen recolocarse valoran mucho su nuevo puesto y por ello su rotación es más baja que en otros colectivos.
Mayor motivación. Las empresas están siendo más selectivas a la hora de hacer jubilaciones anticipadas. El talento auténtico es un bien escaso y tener 51 años, por ejemplo, no es una buena razón para desprenderse de un trabajador. Es importante notar que este colectivo está igual o más motivado que otros, valoran el tener una nueva oportunidad y se implican en la obtención de objetivos tanto para ellos como para la empresa.
INFOGRAFÍA: 5 RAZONES POR LAS QUE CONTRATAR A MAYORES DE 45 AÑOS
Parece ser que, cada vez más, los trabajadores senior vuelven a ser vistos como un activo laboral gracias al conocimiento y la experiencia que éstos acumulan y que les lleva a convertirse en «agentes de conocimiento» para el resto de la plantilla.
Esta es una noticia que hemos de celebrar, aunque todavía queda mucho camino por recorrer. En España se han planteado ayudas a la inserción y otras medidas que son claramente escasas para lo que necesita este colectivo. Y es muy grave que no se valore que son más productivos gracias a la experiencia y cualificación que han adquirido a lo largo de su vida laboral. Esperamos que las cosas vayan cambiando.
GRACIAS A ERAFBADIA @erafbadia
