Las ‘habilidades blandas’ permiten que los empleados puedan resolver los desafíos y problemas humanos que presentan las organizaciones

El mayor miedo de cualquier persona emprendedora es que su empresa u organización no esté lista para el futuro, y lo primero que nos viene a la mente es el temor de no contar con las infraestructuras o maquinarias modernas necesarias para la nueva era digital. En cambio, aún en en un mundo tecnológico y mecanizado, las organizaciones necesitan empleados capaces de manejar y resolver los problemas no-técnicos que presentan los negocios en cualquier mercado.

Conscientes de esto, tanto las áreas de selección para la búsqueda de nuevos candidatos, como los directores de RRHH para la elaboración de planes de desarrollo de personal, están poniendo más atención a las soft-skills como una característica importante de sus empleados.

Qué son las soft-skills

Son conocidas también como “habilidades blandas”, y permiten que los empleados puedan resolver los desafíos y problemas humanos que presentan las organizaciones. Estas habilidades pueden ser aplicadas a cualquier sector y posición de trabajo y no solo concretamente a una tarea técnica específica.

Es primordial tener claro lo que propone el instructor de negociación del INCE: “Los directores de los departamentos de RRHH tratan desarrollar la soft-skills de los trabajadores, ya que impactan de forma significativa en el resultado final de cualquier posición o área. En cuanto a la negociación, por ejemplo, muchas personas sienten que necesitan mayor seguridad en el momento de gestionar conflictos o diferencias del día a día. Nuestro entrenamiento es similar al deportivo: aprendes técnicas y las repites una y otra vez, de tal forma que puedes llegar al momento real con una probabilidad más alta de tener éxito.”

Cuando un empleado es fuerte en sus soft-skills, indica a su superior que no tiene ninguna limitación en la gestión de problemas y las relaciones con las otras personas, sino que por el contrario, puede aportar mejores resultados que no se deriven únicamente del conocimiento técnico. En este sentido, las empresas se benefician de una operativa diaria más fluida y sencilla, con menos “rozamiento” operativo.

Las soft-skills más buscadas

Diversos estudios o rankings concluyen que las habilidades blandas más demandadas son las siguientes:

  • Trabajar en equipo: Se incluyen las habilidades interpersonales y sociales, donde se envuelven la amabilidad, paciencia, comprensión, empatía, entre otras. Hoy en día, la colaboración en el trabajo es fundamental, y con la ayuda de la inteligencia emocional, lograremos desarrollar el lado humano de las personas.
  • Comunicación: tener capacidad para escuchar a los demás es algo poco usual, sin embargo, al igual que las habilidades escritas y orales, son parte de las mejores soft-skills.
  • Adaptabilidad: esta consiste en aceptar todos los cambios, para así poder adaptarse al aprendizaje continuo. Esto significa, que se acepten todas las críticas y se aprenda de ellas con una buena actitud y con las ganas de adaptarse.
  • Gestionar el tiempo: todo lo que tenga que ver con optimizar el tiempo debe ser algo muy bien valorado, además de que se tiene que saber administrar. Por este motivo, para que se pueda gestionar de forma adecuada, es importante priorizar las asignaciones y el tiempo que se empleará en su desarrollo.
  • Actitud Positiva: esto quiere decir, ser optimista, alentador y contar con los mejores deseos de aprender.
  • Valores Personales y Ética: es la capacidad con la que se cuenta para ser honesto y correcto en todo lo que se emprenda, esto suele incluir el compromiso para llevar a cabo un trabajo, la motivación, integridad profesional, modales, y la cortesía.
  • Resolución de problemas y liderazgo: en esta de describe la capacidad de negociación y analítica, la profesionalidad y las habilidades resolutivas. Por otra parte, las organizaciones siempre necesitan personas motivadas que conozcan la forma de seguir instrucciones y siempre tomar la iniciativa.

Invertir en soft-skills

Las negociaciones forman parte del día a día de todos los directivos y gerentes de las grandes empresas, todo esto es necesario para que se consigan los mejores resultados en diversas áreas de equipo, en las relaciones entre niveles inferiores y superiores, con los clientes para obtener más valor de la relación comercial, y con los proveedores, para eliminar las diferencias y estrechar buenas relaciones a largo plazo.

Estas son algunas ideas que puedes usar para mejorar tus habilidades suaves en tu desempeño profesional:

  • Conocer tus puntos fuertes y débiles.
  • Observar a las demás personas, y descubrir cómo alcanzan el éxito.
  • Realizar un feedback con equipos de trabajo.
  • Obtener formación en aquellas habilidades que consideres más útiles en tu caso.

Para finalizar, todas estas actividades serán necesarias para fortalecer las relaciones interpersonales y además, son las herramientas claves para cualquier organización, ya que las mismas pueden brindar una gran calidad a las empresas, además de que pueden ayudar a que un negocio sea rentable en poco tiempo.

 


FUENTE: vía @rrhhdigital

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