Las vacaciones de verano es un momento idóneo para desconectar del trabajo, del estrés de las obligaciones y de las rutinas laborales. Sin embargo, los estudios recientemente dado a conocer demuestran que no es una tarea fácil y que no todos los trabajadores logran hacerlo de manera adecuada.
Aquellas personas que ostentan cargos de responsabilidad o son sus propios ‘jefes’, como los autónomos o freelance, son los que más difícil lo tienen para desconectar en tiempo de vacaciones. Si esto se suma que, algunos, no pueden hacerlo debido a sus obligaciones y tienen que trabajar en verano, la situación puede volverse en contra de la productividad y la eficiencia.
Por ello, Jose Maria Vilar-Sancho, experto en teletrabajo y portavoz de Polycom, ha dado a concer qué 10 cosas se puden hacer para revertir esta situación.
- Llevar al lugar de vacaciones todo lo que se precise para trabajar: dispositivos móviles, portátiles etc.
- Guardar los documentos que se vaya a necesitar en un pendrive, un disco duro, o aún mejor, utilizar algún servicio de almacenamiento en la nube, ya que son mucho más seguros.
- Asegúrarse de que se va a tener wifi en el lugar vacacional ya que con los datos del móvil pueden ser insuficientes.
- Fijar horas y días concretos para trabajar, tanto personales como para el contacto de clientes o compañeros que necesiten contactar.
- Buscar el sitio adecuado para trabajar, con silencio y sin distracciones, para que el tiempo sea más provechoso.
- Sacarle partido a la tecnología. Por ejemplo, el uso de la videoconferencia puede ahorrar el tiempo del desplazamiento.
- Delegar las tareas. A veces es positivo desprenderse de aquellas tareas que pueden desarrollar otros sin supervisión. De este modo se ahorra tiempo y esfuerzos y se genera confianza en los equipos. Basta con dar las principales directrices.
- Descansar. Vilar-Sancho recomienda dormir un mínimo de ocho horas, hacer ejercicio y llevar una dieta equilibrada.
- Volver al trabajo de forma gradual. Hay que retomar las rutinas de trabajo, como mínimo, un día antes de la vuelta oficial a la oficina. Será la única manera de que todas las nuevas obligaciones no supongan un estrés añadido.
- Priorizar tareas. Lo que pueda esperar, que no sea urgente, es mejor dejarlo para la vuelta a la oficina ya que, de lo contrario, podría impedir un buen descanso.
FUENTE: EQUIPOS Y TALENTO @EquiposyTalento