No intentes mejorar tu vida profesional elaborando un buen currículum, mejora tu currículum desarrollando una buena vida profesional.
¿Cuáles son las reglas para crear un buen currículum o presentación profesional? Un currículum tiene una doble función: por un lado, de archivo y, por otro, como herramienta de presentación profesional. El currículo es un documento o contenedor que permite organizar datos sobre la historia laboral y es también una presentación profesional, una imagen de marca personal y reputación online, de lo que eres y puedes ser, de lo que hiciste y puedes hacer y de los servicios que prestas.
El objetivo de cualquier presentación profesional es conseguir un empleo, acceder a una oportunidad profesional u obtener una venta tras un proceso de valoración o selección por parte del empleador o del cliente.
El currículum también es una herramienta de planificación de la carrera porque elaborar y actualizar sus contenidos exige reflexionar sobre la trayectoria y los objetivos profesionales. Un buen curriculum te da una oportunidad de llegar a una entrevista de trabajo, que también es una situación de presentación profesional.
27 reglas para crear un buen currículum o presentación profesional
Te presento las reglas para crear una presentación profesional efectiva, ya sea online o en formato convencional, en un curriculum, en un correo, en una conversación, en un blog o en las redes sociales.
Reglas de profesionalidad
1. Regla de oro: ¿Qué vendes, qué ofreces, qué haces?
Resalta en primer lugar, en el espacio más destacado y en el momento más importante lo que quieres vender, los servicios que prestas, tus habilidades. A veces, es lo único que debes especificar y es lo que más te interesa a ti y a tus clientes potenciales.
2. Regla de la especialización. Si eres especialista en todo, no eres profesional de nada.
Una presentación, curriculum o reseña profesional descritas de forma genérica o poco especializada no facilita a tus potenciales clientes confirmar la marca con claridad lo que les obligará a hacer un esfuerzo de revisión de tu trayectoria y experiencias para reconocerla. Un curriculum genérico tiende a descartarte porque las empresas y los clientes no buscan “profesionales en general” sino profesionales de sectores específicos que solucionan problemas concretos.
3. Regla de la concreción. Si no especificas lo que sabes parecerá que no lo sabes.
Procura en tus presentaciones que las experiencias, competencias, intereses o cualquier tipo de conocimiento que detalles sean poco numerosas y muy concretas. Si pones demasiadas parecerá que estás exagerando tu cualificación. Las generalidades utilízalas sólo para responder a las preguntas difíciles de la entrevista de trabajo 😉
4. Regla de la prueba. El mejor storytelling es el storydoing.
Una prueba vale más que mil currículos. Las historias fomentan el recuerdo y generan un perfil atractiva del candidato, pero son las pruebas de profesionalidad las que ponen en valor la candidatura. Tu currículum no es lo que sabes sino lo que haces.
Muestra de forma prioritaria los contenidos, productos y servicios tangibles prestados o elaborados en tu trayectoria profesional: una app para un móvil Android o iPhone, una campaña publicitaria para una empresa, un diseño, un plan contable-financiero…
El curriculum no es lo que has hecho sino lo que sabes hacer mejor ahora. Muestra tus competencias actuales. Los clientes valoran no tanto tu historial como los logros, experiencias y habilidades recientes.
6. Regla de la experiencia. Lo que hiciste cuenta más que lo que dices saber.
La experiencia práctica tiene más valor que la formación, y la experiencia remunerada más que las colaboraciones u otro tipo de actividades.
7. Regla de los logros. No cuentes tu tarjeta de visita, muestra lo que conseguiste.
La descripción concreta de objetivos alcanzados y proyectos desarrollados tiene más peso profesional que la de nombres de puestos y funciones desempeñadas.
8. Regla de la acreditación. Los méritos oficiales son tu curriculum más efectivo.
Da más visibilidad a los méritos que puedes acreditar de forma oficial o mediante testimonios directos de clientes y empleadores.
9. Regla de los contenidos 2.0. La mejor presentación profesional es la que NO se hace.
El empleo 2.0 no lo buscas, te encuentra. Y en esa misma línea, el mejor curriculum no es el que presentas sino el que descubren: tu blog, tu Twitter, tu Linkedin… Un curriblog o blog que muestra o representa tu curriculum, es una de las mejores presentaciones posibles.
Ningún profesional ‘necesita un blog’ pero un blog puede hacer que muchos ‘te necesiten’ como profesional.
Los contenidos que compartes en la Red pueden y deben ser representativos de tu profesionalidad. Por ejemplo, un portfolio de tus obras audiovisuales accesibles en Flickr, Youtube, Pinterest o en otras redes especializadas; un timeline en Twitter o un muro en tu página Facebook con tus aportaciones, conversaciones y contenidos publicados relacionados con los objetivos profesionales que te interesan; las interacciones, contactos, grupos y recomendaciones recibidas que muestra tu perfil en Linkedin…
Todas las conversaciones y contenidos que publicas e intercambias en Internet forman parte de tu reputación y profesionalidad. Todas las conversaciones que en redes pueden ser entrevistas de trabajo. Ocúpate de que tus clientes encuentren los contenidos que confirman la marca personal y la valía profesional que les quieres transmitir.
10. Regla del valor. No mejores tu currículum, mejora tu vida profesional.
No intentes mejorar tu vida profesional elaborando “buenos currículos”, mejora tu curriculum desarrollando una buena vida profesional.
El curriculum es sólo una herramienta de presentación profesional, un resumen de tu trayectoria que en el mejor de los casos representa tus virtudes y logros. Una presentación profesional atractiva motivará su lectura o visionado, si se trata de un vídeo, pero no implica una candidatura atractiva necesariamente. Si tu profesionalidad y especialización son bajas eso es lo que reflejará tu curriculum y aunque intentes adornarlo tendrás difícil competir con otros candidatos más cualificados.
Reglas de presentación
11. Regla de la visibilidad. Lo más importante, más arriba o más fácil de ver.
Sitúa los logros, méritos y contenidos más relevantes en la zona más ‘alta’ o visible de tus documentos, contenidos, websites o herramientas online de presentación profesional
12. Regla de la presentación online. Linkedin ya es tu curriculum oficial.
Te guste o no, el perfil Linkedin se ha convertido en una herramienta estándar de presentación y selección que además permite compartir y usar tu contenido profesional en muchos otros servicios y aplicaciones de currículum 2.0 y de empleo que son compatibles.
Completar y actualizar tu perfil profesional en Linkedin es un ejercicio de presentación profesional que exige un análisis de tu trayectoria, la definición de los servicios y competencias que quieres ofrecer de tus objetivos y la selección de los perfiles de clientes y empleadores a los que te quieres dirigir.
Una de las ventajas de la Web 2.0 y de esta red social en particular es que puedes inspirarte y aprender de las presentaciones y perfiles publicadas por los profesionales que están en tu mismo ámbito de actuación.
Linkedin es más difícil de adaptar a cada oferta. La mayor limitación que sufre Linkedin como herramienta para postularte como candidato que busca empleo o presta servicios es que no puedes personalizarlo para cada empleador, oferta o cliente. Sería muy trabajoso y poco práctico ir modificando, añadiendo u ocultando información en función de la oportunidad profesional a la que te presentas. Para adaptar tu perfil Linkedin de forma discrecional solo puedes modificar provisionalmente el titular. Algo es algo.
13. Regla del storytelling. No leas tu curriculum, cuéntalo.
Los clientes recuerdan las historias y olvidan los currículos.
No conviertas tu trayectoria en una mera lista de experiencias y acreditaciones. Algunos currículos son más recordados y valorados que otros precisamente porque están organizados alrededor de una o varias historias. No digas qué haces bien, cuenta una historia profesional que lo muestre.
14. Regla de la usabilidad. No te obligues a hacer un curriculum “innovador”, mejor presenta uno fácil de revisar.
Un seleccionador tarda 6 segundos en aceptar o rechazar tu curriculum: ajústalo a lo que quiere encontrar.
Éste es el tiempo que se supone que pasa un reclutador experto analizando el curriculum de un candidato. El estudio, realizado por @theladders en 2012, realizó un análisis del seguimiento ocular de los profesionales de la selección de personas mientras revisaban currículos de los candidatos.
La mayoría de los buscadores de trabajo piensan que los seleccionadores dedican al menos 4 o 5 minutos a repasar su historial pero parece que en realidad solo invierten unos 6 segundos antes de tomar una decisión de filtrado en una primera fase. Al parecer, los profesionales de reclutamiento son muy hábiles focalizando rápido su búsqueda en la información relevante y no considerando otros aspectos relacionados con el formato, diseño o con otras características visuales.
@david_monreal, profesional de @Infojobs, cuestiona la eficacia de los currículum gráficos. Lo importante en esa primera fase de encaja / no encaja es no salirse demasiado del formato habitual para que el reclutador encuentre lo que busca y poder pasar a la siguiente fase del proceso de selección.
Estas conclusiones relativizan el valor de los nuevos estilos de presentación que ofrecen las aplicaciones 2.0. de búsqueda de empleo y las herramientas de candidatura online. Incluso cuando los profesionales de la selección son muy profesionales, facilitarles la revisión de tu CV respecto al de otros candidatos competidores puede ser clave, sobre todo cuando estos competidores pueden estar más cualificados que tú. Cualquier detalle cuenta.
Aprovecha tus 6 segundos de fama resaltando de forma accesible y específica en tu currículo los contenidos profesionales más relacionados con el puesto del que se trate.
15. Regla del atractivo. A igualdad de condiciones gana la presentación más guapa.
A veces una candidatura menos cualificada que otras tiene más posibilidades de superar filtros iniciales de selección si resulta muy atractiva. Una presentación cuidada y personalizada que requiere una importante inversión en tiempo y recursos, también es un indicador per se de la motivación del candidato por la oferta del empleador o del cliente frente a otras candidaturas de ‘copia-pega’.
Algunos “arreglos” pueden aumentar el atractivo de un curriculum o presentación profesional inicial. Por ejemplo:
Una candidatura enviada por correo electrónico que incluye un asunto motivador y una imagen (por ejemplo, una infografía) en el cuerpo del mensaje;
Un videocurriculum muy elaborado adaptado solo para un empleador o cliente;
Una infografía que muestra tus logros y puntos fuertes;
Un “curriblog” (blog con función de currículum) de gran calidad;
Una estrategia de presentación de documentos en papel y/o manuscritos y/o de ‘pruebas profesionales’ lujosamente empaquetadas y enviadas por correo postal;
Una ‘actuación’ o demostración en vivo de habilidades a los clientes o empleadores…
16. Regla de la imagen. Mejor verlo que leerlo.
Las presentaciones profesionales mediante ilustraciones, infografías, imágenes, PowerPoints o Keynotes, videos y contenidos audiovisuales de cualquier tipo facilitan la comunicación y pueden ser una muestra más de profesionalidad independientemente de la ocupación, competencias o sector específico del candidato porque presuponen las competencias necesarias para elaborar esas presentaciones y gestionar y diseñar la información y contenidos que incluyen.
Un vídeocurriculum debe ser una impresión, no un listado. Adapta la presentación de tus logros y méritos profesionales al nuevo fomato que supone el vídeocurriculum. El contenido de una presentación en vídeo no debe ser un mero directorio de acreditaciones y experiencias sino una historia expresada en imágenes.
17. Regla antitiempo. No presentes una cronología, haz una presentación de méritos
Un currículum organizado de forma cronológica es más fácil de elaborar pero menos adecuado para tus intereses porque centra al seleccionador o al cliente en el análisis de tu coherencia profesional en lugar de focalizarlo en tu marca personal actual, en el profesional que eres ahora o en el que quieres ser.
Un diseño cronológico no hace posible situar en las partes superiores del currículo las experiencias que quieres resaltar. Organiza tu currículum o presentación profesional de manera funcional, más que cronológica, destacando las experiencias y méritos más relacionados con los intereses del cliente y el perfil de de la oferta.
Una organización funcional evita dar visibilidad a los gaps temporales, esos huecos de inactividad en la vida profesional o de contenidos alejados de la marca profesional actual. Si tu curriculum cronológico es coherente con el curriculum funcional que quieres presentar entonces no hay nada que adaptar.
18. Regla de la brevedad. Nadie se quejará de que una presentación sea demasiado corta.
Me decía aquella vez monseñor Casaroli (Secretario de Estado Vaticano) que todo buen predicador debe plantear a su interlocutor o auditorio un máximo de tres cuestiones, para que mantengan la atención.
-¿Cómo, entonces los mandamientos de la ley de Dios, son 10?, le pregunté.
-Usted sabe, respondió, que se resumen en dos.
(Felipe González, ex Presidente del Gobierno de España)
Se conciso, nadie lee mucho y menos en Internet. La brevedad además es símbolo de reputación: cuanto más profesional eres más breve es tu currículum. Si tu trayectoria ocupa 10 páginas puede parecer que estás empezando 😉 A efectos de reputación, cuanto más reconocida es tu profesionalidad menos tienes que demostrar, cuanta más experiencia tienes más breve debe ser tu presentación. Es el caso, por ejemplo, de Antonio Gutiérrez Rubí en Twitter, que a pesar de su larga trayectoria se describe escuetamente en Twitter (@antonigr): “Asesor en comunicación”.
La profesionalidad se presenta con brevedad, aunque la brevedad en una presentación no implica profesionalidad. Las presentaciones breves tienden a mostrar autoridad, aunque es cierto que solo se las pueden permitir profesionales que ya cuentan con un cierto grado de notoriedad. Y no todo lo breve parece más profesional, pero es una tendencia a considerar.
19. Regla del mini-curriculum 2.0. Tus perfiles sociales son tu presentación.
Una presentación 2.0 es una presentación profesional especialmente breve adaptada para las redes sociales y para su inclusión en espacios reducidos. El campo ‘biografía’ en Twitter y la ‘firma’ incluida en tus correos electrónicos sería interesante que no fuesen más extensa que el texto de los propios correos, ¿verdad? ¿Cómo hacer una presentación efectiva en formato Twitter? Para ello, respóndete estas preguntas.
1. Qué vendes, qué haces. Especifica tu perfil profesional, marca, ocupación, competencias, servicios o productos. Resalta en primer lugar lo que sabes hacer, qué quieres vender.
2. Para quién lo haces. Detalla la empresa, empleador o clientes actuales para los que trabajas o querrías trabajar. Puedes especificar aquí el puesto en tu organización pero no antepongas la marca de tu empresa a tu propia identidad profesional, asígnales la misma importancia en tu presentación. Si en tu presentación breve solo especificas el “cargo” o puesto de trabajo en tu empresa actual y no describes también tu perfil profesional o tu marca, cuando no trabajes en esa organización, ¿no serás nadie?
Si lo mejor que puedes decir de ti como profesional es que trabajas en una determinada empresa preferirán conocer a la empresa antes que a ti.
3. Quién eres. Cuenta algo personal. Dale un toque no profesional a tu descripción. Puedes contar tus gustos musicales o televisivos, especificar tu deporte favorito, la pasión por tu perro o la mala relación con tu gato 😉
Si quieres tener posibilidades de poder explicarte en detalle, empieza dando pocos detalles. Si no sabes presentarte en pocas palabras, en pocas imágenes o en pocos ejemplos, tal vez no te conoces tan bien como crees.
Si la supuesta lógica de esta regla no te convence y prefieres enviar o presentar todos los datos posibles, podrías hacer una presentación mixta que incluya un curriculum breve o ‘reseña profesional’ de una página o menos, y además un ‘currículum detallado’ más amplio como anexo con toda la información y documentos que desees para que el empleador o cliente pueda consultar lo que desee. De esta forma tal vez te quedes tranquilo al aportarlo ‘todo’.
20. Regla de la accesibilidad. Si quieres que te conozcan, ponlo fácil.
Si envías tu candidatura mediante un correo-e, no adjuntes solo tu currículum en ese correo, incluye también un asunto que describa el contenido y una reseña breve y/o incluso una imagen (por ejemplo, una infografía) en el cuerpo del mensaje que ofrezca los datos más importantes y motive al destinatario a abrir ese adjunto y a no considerarlo portador de un virus 😉
Enlaza frecuentemente para facilitar la ampliación de información en lugar de dar demasiada información en un mismo documento o contenido. Si mencionas tu papel como desarrollador de una app, enlázala; si has sido responsable del avance de un departamento de una determinada organización, incluye un link a esa empresa o a algunos de sus productos o servicios.
21. Regla del humor. La sonrisa es el atajo universal.
Si puedes presentarte con humor e ingenio, demostrarás que los tienes y además motivarás la revisión de tu presentación. Fíjate en estas divertidas bios (biografías) en Twitter:
Si lo que vas a decir no es mejor que el silencio, escríbelo en Twitter. @moedetriana
Si no te gustan las mentiras de los grandes medios, aquí tienes otras diferentes. @mimesacojea
Me gusta el trabajo a distancia. Cuanto más lejos mejor. @damiancar
Eso sí, sería interesante que el uso del humor resalte tu profesionalidad y motivación en lugar de ponerlas en duda 😉
Reglas de adaptación
22. Regla del huésped. Busca las organizaciones y oportunidades que hacen tu curriculum mejor.
Concreta QUÉ puedes ofrecer y será más fácil encontrar DÓNDE ofrecerlo, qué organizaciones ofrecen puestos y funciones que se adaptan a tu perfil en las que puedes batirte con posibilidades con otros candidatos/as.
23. Regla de la pertinencia. Muestra solo lo que piden o les interesa.
Resalta en tu presentación el valor de los méritos más relacionados con las demandas del empleador o de los clientes. Una presentación o curriculum amplio puede ser negativo si no muestra una trayectoria coherente y focalizada respecto a los requisitos de la oportunidad profesional para la que opta.
Es más eficaz presentar una reseña breve de presentación profesional muy adaptada al puesto de que se trate, solo con las experiencias, cualificaciones y datos realmente relevantes y relacionados con el puesto, que una completa guía de tu vida profesional. En esa reseña siempre puedes ofrecer más datos y links que amplíen la información.
24. Regla de la autenticidad. Si “adaptas” tu curriculum o presentación profesional, prepárate para defenderla.
El momento en que un ser humano está más cerca de la perfección es cuando presenta un currículo.
Este tuit de @luisftenorio tuiteó muestra que tendemos a exagerar nuestros méritos y a ocultar nuestras debilidades, aunque suele ocurrirle a todas las partes. Con ironía podríamos decir que una entrevista de trabajo es una conversación entre dos mentirosos.
Las mentiras, medias verdades, omisiones, maquillajes y adaptaciones con las que intentamos mejorar nuestra candidatura son más justificables en la medida en que no se dirigen a simular que se cumplen los requisitos más importantes exigidos por la oferta.
-Todo el mundo embellece un poco el currículum…
-¿Pero es usted Batman o no?
(Tuit de @jaimerubio)
Reglas de efectividad
25. Regla de la evaluación. La mejor presentación es la que funciona.
Puedes realizar presentaciones creativas o convencionales, clásicas o innovadoras pero al final debes elegir las que mejor funcionen para cada objetivo que persigues. Existen muchas aplicaciones para elaborar un curriculum 2.0, pero lo importante siempre es adaptarlas a cada oportunidad.
26. Regla de la recomendación. Lo que dicen de ti te presenta mejor que lo que dices de ti.
Las experiencias, competencias y méritos que vienen avaladas por profesionales u organizaciones más conocidas o reconocidos deben estar mejor posicionadas en un curriculum o presentación profesional, especialmente cuando provienen de clientes, directivos o jefes más que de compañeros, colaboradores o proveedores. Las recomendaciones actúan como marcadores de reputación profesional.
27. Regla de la insistencia. Preséntate mucho.
Elizabeth Holmes, la primera mujer que consiguió 1000M $ por sí misma y la más joven en entrar en la lista ‘Forbes’ de los más ricos de Estados Unidos, tuvo que realizar más de 200 llamadas usando una presentación en formato de historia antes de conseguir un inversor para su proyecto, Theranos, que ha puesto punto final a las agujas y a los tubos con muestras de sangre
Ya sabes que elevator pitch es el término anglosajón que describe una presentación profesional tan breve que puede hacerse en lo que dura un trayecto en ascensor. Es importante hacer buenas presentaciones, pero mucho más es ponerlas en práctica. Si tu presentación es buena, tendrás mucho éxito. Si tu presentación es mala, aprenderás rápido a mejorarla.
Los logros en la vida profesional dependen en gran parte del número de ascensores que en los que te montas y del tipo de ascensores que eliges. Sube a más ascensores y envía más currículum. Pero con sentido.
Y si ya has insistido bastante, tal vez no sea un problema de currículum, quizás es que llegó el momento de reinventarte.
Tu curriculum es lo que eres, pero también lo que quieres ser. Especializa tus objetivos y comunícalos bien