Perder el empleo en un país con un 23% de paro es una tragedia por sí misma. Pero la desesperacion de agotar las prestaciones o la impotencia de que nadie conteste a tus solicitudes es todavía más duro de digerir. Cuando por fin, se encuentra un puesto… las condiciones pueden no ser aceptables.
Éste es el decálogo de la desesperación de un parado de larga duración.
- 1-La no respuesta. Cuatro de cada diez parados ha enviado más de 10 currículums en los últimos tres meses y sólo siete de cada 100 solicitudes han tenido respuesta, para bien o para mal. Lo señala una encuesta que la OCU ha realizado entre 1.111 españoles de entre 18 y 65 años.
- 2-Olvidarse de lo ‘suyo’. Trabajar en lo que uno ha tenido experiencia puede llegar a ser una quimera para un parado de larga duración. El 84% de los parados que busca empleo lo hace en sectores que no tienen que ver con lo suyo. Cualquier área profesional es aceptable.
- 3-El tiempo que pasa. Más de cuatro millones y medio de españoles se encuentran ahora en una situación de desempleo, un 23, 4% de la población en edad de trabajar. Un millón más si se tienen en cuenta los datos de la EPA. El paro en menores de 25 años supera el 50,9%. Y la situación tiende a perdurar. Más de un tercio de los parados encuestados por la OCU lleva más de tres años sin trabajar, a pesar de buscarlo activamente.
- 4-El estrés de la espera. Trabajar supone, en algunos casos, una importante cota de estrés para el trabajador. No tener trabajo, sin embargo, no sólo no elimina esta cota sino que la agrava. Un 20% de los empleados considera que su empleo afecta negativamente a su salud, pero los niveles de estrés, salud o felicidad son bastante peores en el caso de los parados.
- 5-El horizonte precario. Cuando una persona lleva mucho tiempo en paro acepta casi cualquier cosa si tiene necesidad de trabajar. La precariedad acecha a los parados cuando, por fin, consiguen reintegrarse en la vida laboral. A la mitad de los encuestados por la OCU les ofrecieron empleos que no llegaban a los 889 euros mensuales de media. A uno de cada cuatro, de menos de 650 euros. En una de cada cinco, ni siquiera se planteó la existencia de un contrato laboral.
- 6-Sin red para salir del paso. La opinión de los parados de larga duración sobre la asistencia que se les brinda desde el Estado es más bien nefasta. Consideran que la información y ayuda que reciben es insuficiente y que se ofrecen muy pocos trabajos.
- 7-Una ayuda escasa. El 66% de los desempleados no recibe ningún tipo de subsidio en la actualidad, pese a que más de un tercio de los encuestados encadena tres años sin trabajar. El otro 34% que sí percibe ayudas, tiene una media de 635 euros al mes.
- 8-Cuando las barbas de tu vecino… Otro de los factores que contribuye a la desesperación de los desempleados es comprobar cómo sus familiares, amigos o vecinos que sí trabajan lo hacen ahora por mucho menos que antes. El 27% de los trabajadores ha visto, según la OCU, cómo su salario ha menguado en los últimos cinco años de implacable crisis. Más de la mitad trabaja más horas de las que marca su contrato y dos de cada tres no cobran nada por las horas extra que realizan.
- 9-El abismo de la falta de formación. Si encontrar trabajo cuando se tiene algún tipo de formación es muy difícil, hacerlo sin ella es toda una quimera. De los encuestados, el salario que se ha ofrecido en las entrevistas que han realizado oscila en función de su nivel de preparación: 771 euros a quien tiene estudios primarios; 878 para quien tiene estudios medios; y 1.036 para quienes cuentan con estudios superiores. Los que no tenían ningún tipo de estudio, aspiraron a mucho menos.
- 10-El lujo del ‘mileurismo’. «Para los parados el mileurismo es un lujo y la precariedad se ha instalado con fuerza entre quienes han perdido su empleo o nunca lo han tenido», denuncia la OCU.
Fuente: Marcos Iriarte (elmundo)
FUENTE: http://www.capacity.es/