La crisis económica ha llevado a muchos emprendedores a fijar su visión en otras formas de hacer negocio. En banca, por ejemplo, ya no se busca la liquidez, la rentabilidad, o la seguridad del dinero, ahora lo que se pretende es que la actividad en la que se invierta sea sostenible desde el punto de vista social, cultural o medioambiental, con un valor añadido para la sociedad. En este sentido surge un movimiento de agricultores y empresarios dispuestos a convertirse en profesionales del ámbito de la agricultura ecológica, con proyectos medioambientales de gran calado que generen puestos de empleo.
NUEVO PERFIL DE CONSUMIDOR EN ESPAÑA
La agricultura ecológica se está convirtiendo en un sector clave y creciente dentro del consumo alimenticio mundial. Apostar por la sostenibilidad y la defensa del medio ambiente aporta seguridad al consumidor y hace que éste se decante por productos ecológicos a la hora de hacer su compra en el supermercado.
Según el último estudio elaborado por el MAGRAMA sobre la “Evolución de la tipología y perfil sociodemográfico del consumidor de alimentos ecológicos en España”, en los últimos tres años el consumo de productos ecológicos ha aumentado, representando un 29.3% de la población española.
GENERA PUESTOS DE TRABAJO
Esta nueva conciencia de la población española sobre el consumo de productos cultivados como los agricultores de antaño, es decir, libres de herbicidas, plaguicidas, hormonas y otro tipo de productos químicos; ha hecho que se genere más riqueza y puestos de trabajo en el sector.
Las cifras de empleo así lo reflejan, el número de desempleados registrados en las Oficinas de los Servicios Públicos de Empleo aumentó menos de la mitad que la media de los últimos ocho años. El sector agrario es el único que incorpora trabajadores. De hecho, el campo ha generado 5.964 nuevos empleos a lo largo del último mes.
Fuente: econoticias.com