LinkedIN fue una plataforma fundada para ayudar a generar una amplia red de contactos profesionales y, del mismo modo, crear una buena marca personal. Gracias a Pulse, se pueden generar artículos de interés; SlideShare facilita hacer plantillas de negocio; Jobs ayuda a encontrar un empleo según el perfil profesonal del candidato al que se aspira incluir; y Lynda permite realizar cursos para mejorar las aptitudes personales. Sin embargo, tal y como comentan desde Talent Search People, el uso de esta herramienta está comenzando a cambiar.
Un reciente artículo de la empresa Talent Search People señala un cambio en el contenido que se comparte en la red profesional LinkedIN. En su opinión, «cada vez es más común que los usuarios de esta red social compartan información no laboral».
Desde la consultora se recomienda tener cuidado con aquello que se comparte a través de las redes sociales, en general, ya que eso revierte en la imagen que se proyecta como profesionales, hacia las empresas, de manera global. «Cualquier reclutador o profesional de los Recursos Humanos investigará para así saber si un determinado perfil encaja o no con los valores de la compañía», advierten, y añaden que en lo que a la plataforma de Linkedin se refiere, «esta repercusión es mucho mayor».
LinkedIN se describe a sí mismo como «la mayor red profesional del mundo con 476 millones de usuarios en 200 países y territorios de todo el mundo». Además y según el último Social Media Marketing Industry Report (2016), las empresas B2C (abreviatura de la expresión Business-to-Consumer, «del negocio al consumidor», en inglés) utilizan más Facebook, Youtube, Instagram y Pinterest como principales redes sociales; mientras que las B2B (B2B se refiere a la expresión business to business, es decir, de negocio a negocio) centran sus esfuerzos en Linkedin, Twitter, Google+ y SlideShare. Asimismo, desde Talent Search People se anuncia que la tendencia «continuará siendo parecida, en donde las empresas B2B son las que utilizan y prevén seguir utilizando Linkedin frente a las B2C (76% vs 52% respectivamente)».
A diferencia de Facebook, Instagram e incluso Twitter, Linkedin se centra en aspectos relacionados con el ámbito profesional. Por ello, «el contenido que se espera cuando uno ingresa en esta red social es el de leer información de interés sobre el mundo laboral, vacantes, blogs de interés, etc. y no ver contenido relacionado con donaciones, comentarios sobre fotos, ideas políticas etc», afirman. Para ello, ya existen otras plataformas como Facebook, Twitter e Instagram; redes sociales donde poder compartir contenido personal y opiniones.
En este sentido, se recomienda plantearse una serie de cuestiones antes de publicar ninguna información en esta red profesional:
- ¿Agrega valor para los profesionales?
- Publicando dicha información ¿se mejora las relaciones con la red de contactos?
- ¿Este contenido puede ayudar (a tí y a tu empresa) a ser un referente en el sector?
- ¿Es un contenido propicio de Facebook?
- ¿Cuál es el objetivo de la publicación?
«Si las respuestas a dichas preguntas no aportan valor entonces evita compartirlo, ya que estarás transmitiendo una imagen poco profesional y, por otro lado, todos aquellos contactos que no estén interesados en lo que compartes dejarán de seguirte con lo que tu red profesional disminuirá considerablemente», señalan desde Talent Search People.
Finalmente, también se señala que no sólo hay que tener en cuenta lo que se comparte sino también las interacciones con otros usuarios, grupos de debate e incluso los mensajes privados. «Los verdaderos profesionales son los que comparten buen contenido en LinkedIN».
FUENTE: EQUIPOS Y TALENTO — @EquiposyTalento