Innovación y modelo de negocio, son dos términos que han ido ganando fuerza en los últimos años. Hoy están muy presentes en la literatura empresarial, en las escuelas de negocio y en las conversaciones de muchos comités de dirección. Si por libre ambas palabras tienen ya mucha fuerza, cuando las combinamos, probablemente estemos ante uno de los conceptos más emergentes del “management”, y de los que cobrará más relevancia en los próximos años.
En este post, pretendo destacar la importancia de la innovación del modelo de negocio. Para aquellos a quienes este tema les sea ajeno, antes introduciré, de manera sencilla, el concepto de modelo de negocio, y las condiciones que deben darse para que pueda hablarse de innovación del modelo de negocio.
- ¿Quiénes son los clientes?: la respuesta debe incluir, además de una descripción de los segmentos de clientes, los problemas y/o necesidades que estos tienen, y en los cuales la empresa desea focalizarse.
- ¿Qué se les ofrece a los clientes? Se trata de la propuesta de valor, es decir la solución para dar respuesta a los problemas de los clientes. No debe ser únicamente una descripción de productos y servicios, sino que deben hacerse explícitos los beneficios que estos aportan.
- ¿Cómo se produce y se entrega la oferta? Para producir y hacer llegar al mercado la propuesta de valor, las empresas deben realizar una serie de actividades, y utilizar recursos.
- ¿Cuánto beneficio se genera? La respuesta debe tener en cuenta el modelo de ingresos y la estructura de costes. Se trata de clarificar la rentabilidad del modelo de negocio.
Si se acepta como válida la definición anterior de modelo de negocio, se puede decir que para hablar de innovación del modelo de negocio, se deben modificar, al menos, dos de las cuatro dimensiones comentadas.
Uno de los ejemplos clásicos de este tipo de innovación, es el caso de Dell. Si analizamos las transformaciones que realizo esta empresa, veremos que estas afectaron a tres dimensiones:
- ¿Qué? (propuesta de valor): pasó a ofrecer productos personalizados, y a menores costes.
- ¿Cómo? (cadena de valor): pasó a vender ordenadores directamente a los clientes, lo que suponía una novedad en esa época.
- ¿Cuánto?(modelo de ingresos y estructura de costes): logró generar ingresos adicionales al ofrecer la posibilidad de que los clientes seleccionasen complementos no incluidos en el producto básico.
No debe olvidarse que cuánto más se aleje una empresa de su negocio tradicional, más difícil le será lograr el éxito. Eso es lo que sugiere un estudio de Bain and Company, según el cual cada paso que una empresa da para alejarse de su “core business”, hace que disminuyan las probabilidades de éxito.
Al hablar de paso se hace referencia a cada cambió que se produce en alguna de las partes de un modelo de negocio. Por lo tanto, un paso puede ser, un nuevo segmento de clientes, una nueva tecnología, un cambio en la cadena de valor, o en cualquier otra dimensión del modelo de negocio.
Nota: cabe destacar, que el estudio no aporta una descripción concreta del número de elementos que se considera componen un modelo de negocio.
El modelo de negocio de una empresa, define quienes son los clientes, que ofrece la empresa, como se produce, y se vende, esa oferta, y cuan rentable es. Podremos hablar de innovación del modelo de negocio cuando, al menos, dos de estos aspectos sean modificados.
Cada vez, la innovación del modelo de negocio recibirá mayor atención por parte de las empresas, ya sea para explotar de manera exitosa una nueva tecnología, o para redefinir las reglas del juego de una industria madura. No hay duda de que si se logra dar con la tecla adecuada, esta forma de innovación es una gran fuente de diferenciación, y aporta mayores niveles de rentabilidad.
Sin embargo, los desafíos organizativos e individuales que presenta, especialmente en empresas establecidas, son múltiples. El camino para lograr que los intentos por innovar el modelo de negocio se conviertan en resultados, está lleno de piedras.