La elaboración de un CV eficaz es fundamental para conseguir empleo y sin embargo muchas personas no saben elaborarlo adecuadamente.
En este artículo comentaremos los principales errores en la elaboración de nuestro CV que nos pueden dejar fuera del proceso y como evitarlos.
Primer error: CV demasiado extenso.
El CV debe ser breve, las personas que nos dedicamos a la selección de personal recibimos cientos de ellos y solo disponemos de entre uno y dos minutos para decidir si un CV cumple con los requisitos básicos para pasar el primer corte.
Es más importante que sea breve y claro a que quede estéticamente bonito.
Evita plantillas y modelos como el Europass. No te favorecen en absoluto y limitan tus posibilidades de gestionar la información. Lo ideal es que en una solo página se resuman los datos más importantes
Segundo: Tener un CV demasiado genérico.
El CV debe ser breve, claro y adaptado a cada tipo de oferta. Es frecuente que algunas personas tengan un CV estándar. Juntan la información relevante con la que no lo es.
Toda aquella información que tenga poca relación, directa o indirectamente, con el puesto ofertado, nos perjudica porque distrae a quien lo lee de la información realmente relevante.
Tercero: Omitir la información esencial.
La semana pasada me he encontrado con dos CV desesperantes, en uno de ellos el número de teléfono era incorrecto, por lo que me contestaba otra persona, el otro era aún peor, no incluía ni teléfono ni correo electrónico.
Aunque parezca obvio, hay que insistir en poner formas de contacto adecuadas (email, móvil, fijo…) de lo contrario por muy bueno que sea el CV no habrá entrevista.
Cuarto: Incluir información que no nos favorece.
Si no tienes permiso de conducir, no lo menciones. Si tu edad no es la más deseada, no la pongas. Si has realizado un curso de informática hace años y ha quedado obsoleto no lo menciones. Lo mismo podemos decir de estado civil, despidos y otros aspectos de nuestro historial que por un motivo u otro no nos favorecen.
Omítelos si te perjudican o no son relevantes. Date la oportunidad de explicarlo en persona.
Quinto: Centrarse en lo que sabemos y no en lo que sabemos hacer.
El CV no puede ser una suma de títulos y conocimientos. Te van a contratar por lo que sabes hacer, no por lo que sabes. Es suficiente con mencionar la formación.
La experiencia es mucho más importante sobre todo si está relacionada con tu objetivo. Las prácticas y becas son experiencia.
Nuestra experiencia es lo único que nos diferencia del resto de candidaturas. Debemos hacer referencia a nuestros logros y a las competencias que hemos utilizado para conseguirlos.
Destaca tu experiencia.
Sexto: Dedicar el mismo espacio a toda la información.
Dedica más espacio y un lugar relevante a aquellos aspectos de tu experiencia y formación que más te favorecen para un puesto concreto. Reduce al mínimo o elimina aquellos otros no directamente relacionados.
Séptimo: Ofrecer una imagen poco profesional, diseño, estructura, contenido…
El CV es una prueba de la calidad de tu trabajo. Si aparecen faltas de ortografía, será evidente que realizar informes no es lo tuyo. Pasa lo mismo con el diseño, la estructura, etc.
Por ello cuida al máximo la calidad del CV. Es tu tarjeta de presentación. Medita cada palabra que incluyas en el. Si no es esencial o no te favorece, no deberías ponerla.
Incluye una buena fotografía con tu sonrisa natural si quieres causar una excelente primera impresión.