Los emprendedores exitosos piensan de forma creativa, no solo en su producto o servicio inicial, sino en todos los pasos de crecimiento de su startup hasta la madurez. Pero incluso el mejor de ellos puede fácilmente caer en malas decisiones o hábitos que limiten o hieran su negocio, debido a las tendencias humanas naturales y las presiones de los retos del negocio.
Obviamente, el negocio del negocio ha estado ahí mucho tiempo, con muchas “mejores prácticas” bien definidas y documentadas. La creatividad que ignora eso no es de lo mejor normalmente. Cada emprendedor se empeña en encontrar el equilibrio entre seguir aquello que está “probado” y toda la creatividad que pueda diferenciarle.
En mi experiencia como mentor, creo que mantener el pensamiento creativo en esa balanza es un reto para cualquier startup debido a la tendencia del empleado a resistirse al cambio. Estoy de acuerdo en resaltar algunos impedimentos psicológicos clave para el pensamiento negativo en el negocio y el cambio:
Usar solo métricas de datos. Estadísticas chocantes, como pérdidas imprevistas en el último trimestre, pueden generar una decisión de reducción de costes instintiva cuando su posterior análisis y el pensamiento creativo podrían cerrar la brecha existente con nuevas fuentes de ingresos. Usando métricas de datos para tomar decisiones, sin buscar en la raíz del problema y soluciones alternativas mata la creatividad
Seamos optimistas. El optimismo es esencial para el éxito a largo plazo pero puede retrasar u obstruir decisiones a corto plazo. Sé realista cuando tomes una decisión y optimista cuando la lleves a cabo.
La forma en que hacemos las cosas. Está en la naturaleza humana creer que el modo en que hemos aprendido algo y hecho durante mucho tiempo es el mejor y que los demás métodos no funcionan. Nos impide aprender cosas nuevas. Una de las razones por las que cambiar es difícil es que la gente tiene que desaprender el primer modo primero, que es el doble de duro que solo aprender uno nuevo.
Engañado por lo nuevo. Tendemos a recordar lo primero y lo último que oímos. Los vendedores tienden a recordar el último producto cuando venden a los clientes, no el mejor para ese cliente concreto. Así que cuando hay que tomar decisiones, tendemos a recordar la información más reciente. No siempre lo mejor.
El pensamiento grupal para los mejores resultados. Los resultados grupales suelen ir dominados por un líder autocrático, o representante. Mucha gente prefiere ser complaciente para no entrar en conflicto. Las ideas creativas son los valores atípicos y tienden a ser eliminadas primero, en vez de ser evaluadas por completo. La diversidad reta el pensamiento grupal.
Poco apetito de riesgo. Con personas y con animales, sueles conseguir lo que recompensas. Si recompensas el “primer comportamiento correcto” puede que obtengas menos errores pero también conseguirás probar menos cosas nuevas. “Fallo rápido” y “mínimo producto viable” son conceptos de startup orientados a facilitar la creatividad mientras también mitigas el riesgo.
Pensamiento polarizado. Los fallos prematuros tienden a llevar las decisiones posteriores enteramente en la dirección opuesta, lo que puede igualmente conllevar resultados traumáticos. Mucha gente tiende a gestionar los retos pensando, en vez de con creatividad (o ambas cosas) pensando en intentar solucionar un problema. Si son polos opuestos, busca los positivos en ambos lados.
Genera más estrés. Cuanto más crítico se vuelve un problema, menos creativa será tu toma de decisiones. La concentración se ve dañada por el estrés, el juicio y el pensamiento lógico deteriorados, tendemos a no comunicar bien, tendemos a dejar de buscar datos y tendemos a tomar decisiones rápidas, impulsivas y a corto plazo. Trabaja en reducir el estrés.
Ni feedback ni análisis de resultados. Cada decisión necesita un repaso y un feedback continuo entre sus constituyentes para su validación y puesta a punto. En el mundo actual de los negocios, la única constante es el cambio. Incluso las buenas decisiones requerirán ajustes a medida que el entorno o los clientes cambien. Evita la tendencia de enmendar la culpa y buscar excusas.
Fracaso en el aprendizaje. La experiencia es inevitable pero el aprendizaje no. Repasar y medir los resultados de tus decisiones facilita el aprendizaje, igual que las métricas de ventas facilitan un mejor entendimiento de las ventas. La creatividad sin aprendizaje tendrá una vida corta e inefectiva. El aprendizaje necesita escuchar y pensamiento creativo para tener sentido a través de las experiencias.
Es hora de dejar pasar los mitos y misterios de la creatividad. La gente creativa no tiene por qué tener personalidades excéntricas, trabajar en arte o estar aislada para conseguir resultados. Es posible ser creativo en tu startup. De hecho, si no lo eres, tu startup se unirá rápidamente a los rankings del mundo corporativo que te encanta odiar. Piensa en eso.
Via AlleyWatch
FUENTE: http://www.eureka-startups.com/