Tu curriculum vitae puede contener toda la información esencial que los responsables de recursos humanos de cualquier empresa están buscando, pero si ésta no es fácil de encontrar o no está bien organizada, puedes correr el riesgo de que tu curriculum acabe en la papelera.

Una gran parte de estos problemas se debe a los formatos de curriculum que usamos, otras veces simplemente es que no hemos ordenado de manera correcta la información y hemos condensado demasiado texto en muy poco espacio, dificultando su lectura.

También puede deberse a que no tenemos claro qué extensión debe tener y tratamos de meter en poco espacio mucha información.

Si quieres que tenga un aspecto profesional deberás cuidar esos aspectos con el fin de mejorar tus posibilidades a la hora de encontrar un puesto de trabajo.

Evitar esto es sencillo. Si tu CV se ve demasiado tosco y con un exceso de texto, es hora de eliminar ciertas cosas y liberar algo de espacio.

Un curriculum visualmente atractivo y equilibrado en la distribución de la información hará que el responsable de recursos humanos que lo está examinando pueda analizar de manera más eficiente tu candidatura sin ser abrumado.

A continuación haremos hincapié en algunos de los aspectos que tendrás que vigilar para mejorar la organización de tú curriculum.

Elimina las palabras innecesarias

Un curriculum no es una novela. No te debes andar por las ramas ni ser extremadamente descriptivo, lo que sí tiene que ser es conciso.

Muchas personas se extienden demasiado a la hora de detallar sus logros o a la hora de explicar las tareas que han desempeñado en trabajos anteriores.

Reordenar las frases puede ser un buen comienzo, lo siguiente pasará por eliminar todo aquel texto que sea redundante. Una buena práctica que puedes llevar a cabo es ir creando versiones resumidas de tu curriculum hasta dar con la distribución correcta.

Reduce el detalle de los trabajos antiguos

Un error común en muchos CV es que a la hora de listar y describir las tareas realizadas en empleos anteriores se utiliza demasiado espacio.

Si ya has pasado por varios empleos, ¿de qué te sirve detallar las tareas desarrolladas en un empleo de hace 15 años? Por este motivo es probable que debas hacer cambios.

Concéntrate en tu experiencia reciente o en aquellas más relevantes. Para el resto de trabajos realizados podrás incluir tan solo el cargo que has desarrollado y la duración.

De manera general, las posiciones actuales son las que mejor pondrán de manifiesto tus habilidades. Si los empresarios quieren saber algo más, ya te lo preguntarán en la entrevista de trabajo.

Haz un buen uso de los encabezados

Definir más secciones puede mejorar la legibilidad y el atractivo visual de tu curriculum vitae. Permite a los responsables de RRHH ver rápidamente las áreas clave.

Encabezados como:

  • Competencias básicas
  • Experiencia profesional
  • Formación

Son encabezados estándar que todo CV debería incluir. No utilices un tamaño demasiado grande y para la tipografía, lo mejor pasa por usar una de tipo tradicional.

Suprime lo irrelevante

Atrás quedaron los días en los que los CV incluían los hobbies o actividades que tenía una persona. Este tipo de información es irrelevante para el empresario, salvo que esté estrechamente relacionado con el puesto de trabajo. Aun así, esto debería guardarse para la entrevista.

Tampoco es necesario enumerar cuales fueron nuestras calificaciones de la escuela secundaria (sobre todo si no son excepcionalmente altas) ya que tampoco aportarán nada.

FUENTE: ambito-financiero.com