La planificación, los objetivos o esperar lo inesperado, algunas de las cuestiones a tener en cuenta
Después de implantar el teletrabajo en tiempo récord, ahora las empresas y sus trabajadores deben afrontar el siguiente desafío: organizar nuevamente su trabajo ante el actual escenario de desescalada y de progresiva adaptación a la ‘nueva normalidad’ post coronavirus.
Hoy en día nos encontramos con un cóctel muy diverso de realidades según la situación de cada trabajador. Desde personas que siguen teletrabajando al 100%, a aquellas que tengan que acercarse de forma ocasional a la oficina, pasando por las que teletrabajan algunos días o unas horas.
Además, se suman otra serie de factores como el inminente comienzo de jornadas intensivas por el verano, la necesidad de asignar distintos horarios para que no coincidan demasiadas personas en la oficina o la incorporación de nuevas rutinas de convivencia y limpieza en el espacio de trabajo.
Necesitamos reorganizar nuestro tiempo
Ante esta nueva y cambiante normalidad laboral, los expertos de Sodexo Beneficios e Incentivos señalan la importancia de organizar nuestro tiempo, tanto en la esfera personal como profesional.
El entorno laboral y la forma de trabajar habitual en la época previa al coronavirus cambiará y esto puede dar lugar a que un incremento de la multitarea dificulte a los equipos alcanzar sus objetivos, trabajar de forma efectiva e incrementar su estrés.
En este contexto, Sodexo Beneficios e Incentivos propone estos 7 consejos para evitar que la multitarea y una realidad cambiante no pueda contigo:
1. Planificación semanal y diaria
Es importante que al inicio de cada semana dediques unos minutos a planificar las diferentes tareas teniendo en cuenta las necesidades que puedan surgir en este escenario cambiante.
Entre otras cosas, deberás tener en cuenta qué días teletrabajaremos, si habrá desplazamientos para gestiones, si tendremos que cuidar de los niños. Después, cada día es conveniente hacer una lista de tareas y tener claro cuáles son prioritarias.
2. Marcar objetivos
La consecución de objetivos es el fin último del trabajo y la multitarea excesiva en esta época de cambios hacen que sea más complicado conseguirlos. Por eso es importante que el trabajador se marque objetivos, tanto diarios, como en el medio plazo, para que pueda seguir sintiendo satisfacción y progresión, incluso en tiempos complicados como el actual.
3. Aprovechar las horas más productivas
Desde Sodexo aconsejan realizar las tareas más complejas durante las horas más productivas del día o aquellas en las que se está más tranquilo en casa.
4. Evitar distracciones
Es importante aprender a marcar límites a los compañeros o, ahora que también se trabaja más habitualmente desde casa, a las personas con las que se convive, para que no interrumpan el trabajo.
En este punto, también hay que tener en cuenta que eso puede implicar decir que no a determinadas peticiones de la forma más constructiva posible.
5. Esperar lo inesperado
Durante la desescalada, las situaciones ajenas al control del trabajador serán más habituales que nunca. Habrá cambios en el hogar, ya que las clases de los niños van a continuar en casa y puede que durante la desescalada uno de los padres vuelva a trabajar y todo el cuidado de los hijos recaiga sobre el que se queda teletrabajando.
Por no hablar de los cambios organizativos que plantee la empresa o la evolución de las medidas de contención que aplique el gobierno según avance la pandemia. Debemos estar preparados a cambios en las rutinas y ajustar nuestra forma de trabajar, si queremos obtener los mejores resultados.
6. Agrupar las tareas
Probablemente durante la desescalada y en la ‘nueva normalidad’ se empiecen a combinar diferentes formas de trabajar, en la oficina o en casa, por la mañana o por la tarde. Y puede que algunas tengan más sentido hacerlas más en un lugar o en un momento concreto.
Por eso es recomendable agrupar las tareas por similitud para poder realizarlas de forma simultánea y efectiva.
7. No querer abarcarlo todo
Con el teletrabajo, la mayoría de los empleados han visto cómo su volumen de trabajo se ha incrementado durante la crisis.
Las videoconferencias se han multiplicado, los objetivos han cambiado y eso conlleva más estrés y ansiedad. Esto seguramente no cambiará durante los primeros meses de la desescalada, sino que habrá que añadir nuevas rutinas que lo compliquen todo más aún.
Por eso es importante conocer los límites y el trabajo que se puede abarcar, para comentarlo con los jefes o pedir ayuda antes de llegar al límite.
FUENTE Y AGRADECIMIENTOS A: vía @EquiposyTalento
Imagen de Ani Markarian en Pixabay