Innovar en el pequeño comercio es posible. Hay que dejarlo muy claro, porque hay muchos pequeños comercios que se han dado por vencidos y ya no tienen motivación alguna. Ahora bien, innovar en el pequeño comercio no es fácil.
¿Cómo innovar en el pequeño comercio?
Las posibilidades son muy diferentes dependiendo del tipo de comercio, de la persona que está al frente, del lugar en el que se encuentra, del tipo de clientela, de la experiencia, etc.
Así que mi recomendación sería comenzar por una reflexión previa que nos ayude a centrar el tiro.
Como indicaba el otro día en el blog de Made in Zaragoza explicando mi intervención en MIZ-LAB el laboratorio de innovación comercial lo primero es fijar una estrategia (por cierto os animo a ver los resultados de este laboratorio porque daremos muchas claves para el pequeño comercio).
Definir una estrategia partiendo de nuestro origen
Y lo hacemos como Chicote cuando llega a un restaurante: observa, come, pregunta y ve cómo funciona para ir detectando las áreas de mejora.
Pues lo mismo os recomiendo hacer con vuestro comercio, trabajando el Círculo de oro de Simon Sinek:
- El PORQUÉ es tu propósito, tu motivación para actuar. ¿Por qué pusiste en marcha tu tienda? ¿Por qué te levantas cada mañana?
- El CÓMO son tus principios: los procesos, las acciones específicas para realizar el PORQUÉ.
- El QUÉ son tus resultados, los productos o servicios que ofreces conseguir hacer realidad tu PORQUÉ.
Analizar nuestro modelo de negocio
Y aquí empiezo a trabajar el modelo de negocio de la tienda, basándome en el business model canvas
- Nuestra propuesta de valor actual ¿Qué ofrecemos? ¿Es una única propuesta? ¿Por qué nos compran?
- Nuestros clientes actuales ¿Quiénes son? ¿Pertenecen a categorías diferentes?
- Canal de comunicación por el que llegamos a nuestros clientes
- La relación que tenemos entablada con los clientes (no la que nos hubiera gustado tener y no tenemos por falta de tiempo o de medios).
Continúo el análisis del modelo de negocio actual con recursos y actividades:
- Analizamos los recursos disponibles de la empresa y definimos cuáles son los recursos clave y apuntamos los que echamos en falta.
- Y revisamos todas las actividades que realiza la empresa, indicando aquellas actividades clave en las que debería centrarse y apuntando las que consideramos menos importantes.
Y entramos con un punto fundamental para cualquier estrategia empresarial, pero más si buscamos que esta estrategia sea innovadora:
- Los colaboradores ¿Con quién estamos colaborando? ¿Quiénes son nuestros aliados? ¿Qué relación tenemos con ellos? Y vamos apuntando otros colaboradores que echamos en falta o problemas que estamos teniendo con nuestros aliados actuales.
Para cerrar nos adentramos en los números:
- Estructura actual de costes, sin olvidar las horas que no cuantificamos y esos otros gastos que no solemos incluir.
- Estructura de ingresos, analizando no sólo las cantidades sino las procedencias, la tendencia, la estacionalidad, etc.
Detectar las áreas de mejora
Las áreas de mejora van saliendo de forma natural, a medida que realizamos el análisis del modelo de negocio de nuestro comercio:
- Lo que nos gustaría hacer
- Los problemas que hay que solventar
- Las tendencias detectadas
- Colaboradores que echamos en falta
- Ideas de otras empresas que nos gustaría implementar
- Mejoras en la comunicación
- Organización de tareas
- Enfocarse en determinadas áreas y olvidar otros que no resultan rentables
- Volver al origen o desprendernos de él
- …
Ponernos en el lugar del cliente
Y con esas áreas de mejora en mente, empezamos a trabajar desde el punto de vista del cliente, porque no lo olvidemos, el cliente es el motor de nuestro comercio.
Piensa en la vida de esos clientes:
- lo que hacen (profesional y personalmente),
- cómo lo hacen y
- cómo se sienten.
Es fundamental trabajar el mapa de la empatía con nuestros clientes fundamentales para responder a dos grandes preguntas que nos ayudarán a innovar:
- ¿Qué problemas tienen qué solucionar?
- ¿Qué resultados positivos obtienen?
Vas a empezar a tener un conocimiento mucho más profundo de tus clientes y eso va a ir dándote ideas para adaptar tu producto o tu servicio, pero con este primer estudio de los clientes, tienes que salir al mercado y contrastarlo con ellos. Sin mostrarles todavía tus ideas, ir preguntando, conversando y averiguando si tus reflexiones encajan con la realidad.
Hay que observar no sólo lo que cuentan, sino cómo compran, cómo viven… hacer un seguimiento de los clientes como si fuéramos su sombra.
Y hay que aprender a escuchar a nuestros clientes, sin juzgar, para ayudarnos a ajustar las ideas innovadoras que llevamos en mente.
Y con ello ir realizando pruebas, porque los tiempos han cambiado y es necesario testear cualquier novedad que queramos lanzar.
Recomendaciones para innovar en pequeño comercio
- Trabajar con metodologías ágiles es fundamental para adaptarnos al mercado actual
Las metodologías ágiles nos permiten probar de una manera rápida y barata los cambios que queremos implementar
- Colaborar! Con otros comercios, con otras empresas, con personas del entorno, con los clientes, etc.
Un ejemplo que recibió el premio de cooperación entre empresarias de Aragón 2015fue la iniciativa Cuidamos de tí, cuida de nosotros
- Utilizar las redes sociales para mostrar cómo sois y lo que hacéis
Un ejemplo fue el primer CashMob que organizamos en Zaragoza
- Motivarnos todos los días
Si necesitáis motivación aquí podéis encontrar algunas claves Motivación del pequeño comercio
Y no olvidéis el camino para innovar
El primer paso es entender que todo ha cambiado
El segundo que hay que observar las tendencias que surgen y los comercios a los que les va bien, no para copiar sino para aprender y adaptar a nuestro comercio.
El tercero definir nuestra propuesta
El cuarto lanzar nuestro prototipo para ver cómo responde el mercado a la innovación que proponemos
El quinto evaluar y modificar nuestra propuesta para adaptarla a las reacciones de los clientes
El sexto trabajar el equipo humano, los elementos limitantes que nos impiden desarrollar el cambio
Y por último trazar el plan de acción, una hoja de ruta sencilla con las acciones que queremos hacer, las fechas y los recursos que necesitamos.
Innovar en el pequeño comercio es posible, pero no es un camino fácil, así que para, reflexiona y actúa. Y si necesitas ayuda, ya sabes dónde estoy.
Busca la forma de innovar de manera inteligente, adaptada y con resultados.
La revolución de la #InnovacionInteligente está en marcha ¿Te unes?