El absentismo laboral cuesta más de 4 millones de euros a la Seguridad Social cada año. El conocido como “efecto crisis” está relacionado directamente con el absentismo laboral, a medida que el primero disminuye el segundo aumenta. Según el IV Informe Adecco sobre Absentismo este fenómeno laboral ha crecido por primera vez en seis años. Para las empresas el absentismo laboral supone, de nuevo, un reto que afrontar.
A pesar de que se han realizado diversos estudios sobre absentismo, apenas existen datos relativos al colectivo de personas con discapacidad. La creencia más extendida entre las empresas es que las personas con discapacidad tiene una mayor tendencia de bajas laborales, cosa que no es cierta. Aunque se ha avanzado, continúan existiendo razonamientos que defienden la no contratación de personas con discapacidad.
Según Francisco Mesonero, Director General de la Fundación Adecco, “estas creencias son producto de clichés históricos y culturales que nuestra sociedad tiene que superar”, a lo que añade que esto se debe “fundamentalmente al miedo a lo desconocido debido a la falta de experiencias previas”.
Una encuesta realizada a 297 empresas concluye que la discapacidad no es un factor que potencie el absentismo laboral sino que, al contrario, la incidencia del mismo es inferior a la media en todos los supuestos. Los datos muestran que la media de todos trabajadores se sitúa en el 10,4%, superando la media de trabajadores con discapacidad que se encuentra en el 6,3%. En este sentido, un 79% de las compañías reconocen no registrar más ausencias entre sus empleados con discapacidad.
Tras la encuesta, realizada por Adecco, se hace evidente que la incidencia de ausencias es superior cuando se refiere a la globalidad de los trabajadores y desciende cuando se trata de personas con discapacidad. De hecho, en ambos grupos la máxima indicencia de absentismo se encuentra en las bajas por contingencias comunes aunque, aun así, son menores las relacionados con personas con discapacidad que con la media global de los trabajadores, 29% frente 43% respectivamente. Asimismo, como muestran los datos, las ausencias relacionadas con por problemas leves de salud (19% frente al 23% del general), por el “efecto lunes” y el “efecto puente” (22% sobre el 10%) son más bajas.
¿POR QUÉ LA MEDIA DEL ABSENTISMO LABORAL ES INFERIOR CUANDO HABLAMOS DE PERSONAS CON DISCAPACIDAD?
– Las personas con discapacidad cuentan con valores intrínsecos como el esfuerzo, afán de superación, capacidad de sacrificio, motivación… Esto se traduce en una alta fidelidad y estabilidad.
– El índice de actividad de personas con discapacidad es aun bajo (36,6%) por las barreras que encuentras en su acceso al mercado laboral, o porque sus pensiones les garantizan unos ingresos mínimos. Este hecho, evidencia que las personas con discapacidad que trabajan lo hacen porque realmente quieren, es decir, se esfuerzan por ser parte activa de la economía y de la sociedad.
– Para las empresas, los beneficios fiscales son un elemento que incita a contratar personas con discapacidad. Resulta obvio que su contratación es muy rentable.
