Todos sabemos, y muchos lo hemos podido comprobar personalmente, que hay desaprensivos que tratan de aprovecharse de las personas castigadas por la crisis mediante ofertas de trabajo falsas. Trabajar en casa o recibir un buen salario, son algunos de los reclamos más utilizados para atraer nuestra atención.

La revista Forbes ha identificado algunas de las características que nos pueden llevar a pensar que la oferta de empleo que estamos leyendo es falsa. La realidad es que «nadie da duros a peseta».

Estos son algunos ejemplos:

 -No se necesita experiencia y/o formación. Por lo general, para desempeñar cualquier trabajo se necesita un mínimo de experiencia y de preparación. Cuando veamos por lo tanto que no se pide, sospechemos del anuncio.

 -Excelente remuneración. A todo el mundo le gusta ganar dinero pero desde hay ofertas de empleo que ofrecen sueldos impensables para la tarea a realizar. Lo mejor es informarse sobre el salario que suele percibirse en un puesto similar.

-Envío previo de dinero. Si te piden que mandes dinero, proceses pagos o transfieras fondos, deja de leer la oferta de empleo. Estás ante un fraude e incluso en riesgo de caer en el engaño para cometer un delito.

Te ofrecen el trabajo en el mismo momento. Lo normal es que la empresa lleve a cabo un proceso de selección, estudie al candidato, revise su expediente, haga una entrevista personal y luego decida. Necesitan saber si la inversión en el posible trabajador va a ser rentable.

-Recibe un e-mail de una dirección que no es de la empresa. Cuando participas en un proceso de admisión, la persona del departamento de recursos humanos que contacte contigo debe tener un correo de la empresa. Si es de Gmail, Hotmail o cualquier otra, hay que sospechar.

-Te piden datos personales. Si cuando te ofrecen trabajo te piden al mismo tiempo datos personales para tramitar la solicitud, como el número de la Seguridad Social o el número de cuenta bancaria,sospecha.

 -El anuncio está mal escrito. Cuando el anuncio se ha traducido textualmente, o contiene errores, o no explica claramente en qué consiste el trabajo, lo más probable es que estés ante un intento de estafa.

 -Contactan a todas horas. El mundo de los negocios funciona a pleno rendimiento los siete días de la semana, pero los departamentos de Recursos Humanos tienen un horario delimitado. Si a las dos de la madrugada recibe un mensaje, tenga claro que el presunto contratante no existe.

 -Tienes que pagar por el trabajo. Si te piden dinero por el software o por un ordenador portátil que le prestará el trabajo, te están timando.

-No se identifica la persona de contacto. Cuando hemos respondido a una oferta de trabajo y contactado con la empresa, una persona responsable debe identificarse. Tanto su es por teléfono como por email, la persona en cuestión debe decirnos su nombre y su cargo, y facilitarnos un número de contacto.

Son algunas de las claves que debéis tener en cuenta para detectar las ofertas de empleo falsas con las que de una forma u otra algunas personas tratan de hacer  negocio a costa de los desempleados.

FUENTE: http://www.portalparados.es/