La primera pregunta que mucha gente parece preguntarse cuando contempla una nueva startup es donde van a conseguir dinero de un inversor. Es una pregunta válida, pero todo el dinero que existe en el mundo no va a hacer que el negocio funcione si no existe un plan que lo lleve a buen puerto. Sugiero que antes de ir a buscar inversión, existen varias preguntas importantes que hay que responder si la inversión es la puerta de tu éxito.
En realidad, el mejor camino que te va a llevar a asegurarte el éxito de tu startup es hacer algo que ames, en contra de algo que pienses que te hará muy rico. Naturalmente, todas estas cosas y muchas más son críticas, por lo que es muy importante mantener siempre en primera línea las prioridades. A continuación tienes unas preguntas clave para que te preguntes a ti mismo, antes de pedir dinero a otros:
1. ¿Realmente necesitas a un inversor para llevar a cabo tu proyecto?
En tu plan de negocio, calcula la cantidad que necesitas para llevar a cabo tu negocio y añádele un margen de un 25 %. Considera alternativas que no sean monetarias, como ofrecer participación a otras personas para que formen parte del equipo fundador o el trueque de servicios. Levantar capital es muy estresante y lleno de dificultades, por lo que el 90 % de los emprendedores que han logrado el éxito han empleado el bootstrapping.
2. ¿Tienes un plan viable?
Si todavía no has escrito tu plan de negocio, lo más seguro es que no tengas ni idea de cuánto dinero necesitas realmente, o incluso si la oportunidad de negocio es real. El proceso de redactar el plan de negocio es mucho más valioso que su resultado, debido a que te fuerza a pensar en todos sus componentes, y asegura que todos ellos encajan.
3. ¿Qué experiencia tienes en el negocio que quieres llevar a cabo?
Ten mucho cuidado si vas a entrar en un área de negocio desconocida, aunque parezca que sea muy fácil o que prometa un gran retorno. Los verdaderos secretos de cualquier negocio no están en los libros de texto, y no puedes creer todo lo que lees en Internet. La experiencia es el mejor maestro.
4. ¿Tienes confianza en ti mismo y eres autodisciplinado?
Empezar un negocio es un trabajo muy duro y va a requerir muchos sacrificios. Vas a trabajar de forma independiente, por lo que todas las decisiones y toda la responsabilidad la vas a asumir tú. ¿Serás capaz de ser perseverante y construir tu nueva empresa con éxito?
5. ¿Tienes pasión por tu idea y oportunidad de negocio?
No existe la alegría en la apertura de un nuevo negocio si no aguantas a la gente, el ambiente que rodea a los negocios o el día a día que conlleva la responsabilidad de tu trabajo. Mucha gente se siente mejor sirviendo a un negocio, mientras que otros están más cómodos construyendo y creando.
6. ¿Realmente entiendes y aspiras a vivir como un emprendedor?
Ser el fundador de una startup no es un simple trabajo, pero es un estilo de vida, como el hecho de casarse o de ser soltero. De hecho, es como estar soltero, ya que los fundadores no tienen a quien acudir para apoyarse, con quien tomar decisiones o a quien culpar.
7. ¿Qué tipo de startup se adapta más a tu mentalidad?
Más allá de un nuevo producto tradicional o de un nuevo modelo de negocio, siempre es posible comprar o adquirir un negocio ya existente, o una franquicia o unirse a una empresa de marketing multi-nivel, o simplemente ser un consultor. Cada una de estas opciones tiene sus propios retos y retorno de la inversión. Pregunta a tu alrededor.
Si has llegado hasta este punto, ahora puedes empezar a pedir dinero para tu negocio. Los profesionales te dirán que la secuencia que debes seguir es primero con tus amigos y la familia, los Business Angel en segundo lugar, y sólo después, el capital riesgo. Cada uno de ellos implica un coste y un esfuerzo.
El proceso para llegar a ellos es el networking. Empieza asistiendo a los eventos para emprendedores. Debes saber que por el simple hecho de asistir no funciona. Utilice tu espíritu emprendedor para iniciar algunos intercambios y relaciones que pueden llevarte a un siguiente paso.
Empezar un nuevo negocio es una maratón, así que debes prepararte y entrenarte antes. Conseguir dinero es complicado, pero no es la parte más difícil. La parte más dura es hacerlo todo disfrutando. Empieza poco a poco, como un caracol, y asegúrate de que disfrutas del camino antes de correr detrás del dinero.
Marty Zwilling