Como trabajador freelance eres tú quien establece cuánto quieres cobrar por tu trabajo. Dar con la cantidad adecuada no siempre es fácil. Esta es la forma de lograrlo

Una de las cuestiones clave de cualquier negocio es el precio y con los trabajadores freelance ocurre lo mismo. Si el coste de tus servicios es muy alto puedes perder clientes, pero si es demasiado bajo terminarás trabajando mucho para ganar poco.
Dar con un precio por horar o por servicio adecuado a tus necesidades reales es importante para optimizar tu negocio, es decir, tu trabajo y tus conocimientos. Una estrategia que mucha gente sigue en este punto es la de empezar con un precio ajustado pensando en subirlo cuando mejore la situación. Se trata de un error ya que llegado el momento será complicado explicar a tus clientes la subida y además puede que termines pensando que ese precio inicial era justo.
Por eso mismo es importante aprender a calcular el precio que necesitas cobrar por tus servicios.

Qué debes tener en cuenta

Lo primero que debes tener claro es qué elementos debe incluir el precio. Para empezar piensa en el tiempo que necesitarás para completar el proyecto porque a fin de cuentas, lo que vendes es tiempo y conocimientos. Este es el momento de valorar si quieres cobrar por horas o por proyecto, pero en cualquier caso deberás fijar un precio por hora de servicio, aunque sólo sea para hacer el cálculo de cuánto cobrar por proyecto.
A esto tan básico debes sumarle todos los gastos en los que incurrirás, ya que como freelance no hay ninguna empresa detrás que vaya a pagarte cuestiones los servicios que necesitarás para hacer el proyecto. Imágenes de pago, gastos de viaje, suministro energético, wi-fi, móvil… Todos estos gastos deben reflejarse en tu factura.
Si quieres puedes incluso calcular cuánto quieres ganar al mes, sumar todos estos gastos adicionales y dividirlo por el número de horas que deseas trabajar. Auqnue muy rudimentario, te dará una idea de lo que debes cobrar, tal y como explicamos y ampliamos en este artículo.
Prepárate para negociar
Si ya tienes algo de experiencia en el mundo laboral y de los negocios sabrás que una cosa es el precio que tú establezcas y otra el precio final que acabarás cobrando. Como freelance debes estar dispuesto a negociar. De hecho, si establecer el coste de tu servicio no te convence, siempre puedes pedirle al cliente que te mande su presupuesto y estarás tirando la pelota a su tejado.
En estos casos tendrás que prepararte para negociar.

No tengas miedo a decir que no

Uno de los errores más repetidos por los autónomos y trabajadores freelance es terminar asumiendo una carga de trabajo mayor a la que pueden soportar o atarse a clientes que pagan poco y tarde por el mero hecho de que llevan más tiempo con ellos y les parecen algo ‘seguro’.
Si vas a ser autónomo tienes que acostumbrarte a decir que no y hacerlo de forma que no mines futuras relaciones con ese cliente. En este sentido, piensa si prefieres tener varios clientes pequeños que paguen poco, con todos los problemas de pago y administración que eso supone, o dos o tres más grandes y que paguen mejor por tus servicios. Lo segundo puede parecer más seguro, al diversificar tus fuentes de ingresos, pero termina no siendo lo más rentable.

Los clientes que pagan menos tienden a aceptar trabajos con estándares de calidad menor y eso puede terminar afectando a tu reputación. Además, muchas veces estos pequeños clientes terminan siendo los más exigentes y haciendo que un presupuesto ajustado termine desbocándose. Dicho de otra forma, que tus costes se disparen o que tu precio por hora se reduzca dramáticamente.


Fuente: http://gestionpyme.com/como-establecer-tu-tarifa-como-autonomo/