Nos movemos en la era digital y eso ha hecho que muchas cosas se hayan transformado. La gestión del talento es una de las áreas que más cambios está viviendo. Y ahí Recursos Humanos tiene un gran reto. En esta nueva realidad tenemos que ser capaces de identificar, atraer y comprometer al mejor talento.
Talento digital
Con los cambios, las necesidades también varían y con ellas la búsqueda de talento que pueda dar respuesta. En cada realidad tenemos que observar qué se demanda, qué talento sería el más adecuado. Una de las claves es entender la globalidad del talento. No podemos centrarnos en las famosas competencias técnicas.
¿Qué se supone que es la transformación digital? Se dice que hacer más con menos. La idea es que la tecnología nos ayuda con eso, ya que podemos automatizar procesos y centrarnos en lo importante, las personas. Cuando parece que el talento escasea o hay una guerra por él, la parte digital se encarga de encontrar rápidamente a esa persona que nos puede ser útil.
Máquinas como soporte, personas como eje
¿Cómo identificar qué talento necesitamos? Entender el talento en la era digital significa tener una visión mucho más amplia. La innovación y las nuevas tecnologías son ejes de la gestión del talento. Si constantemente está cambiando todo, el talento debe aprender a adaptarse y hacer que la transformación digital sea palpable en la cultura de las organizaciones.
La tecnología es la base, pero las personas son las que van a poder ser la clave en la era digital. Para esto, el equipo que se encargue de la gestión del talento debe estar bien preparada. Estar formada para poder liderar la transformación y ser el eje en el cambio de la organización.
Cultura digital
La cultura es la base de la organización y si no hay un auténtico convencimiento, acabamos teniendo parches temporales que se caerán con el tiempo. Se trata de que el foco esté bien claro y todo el equipo vaya de la mano. Para ello es importante que la propia empresa facilite programas internos de desarrollo en conocimientos y habilidades digitales. Cuidar el talento interno es esencial y prioritario, algo necesario para comprometer y motivar al equipo.
De esta manera se agilizan procesos y es más fácil enfocarse en la gestión del talento, dentro y fuera de la misma empresa. La era digital nos permite tener procesos de selección en los que hace tiempos no hubiéramos dado con el talento que ahora estamos encontrando. Personalizar y poder poner foco en lo que realmente necesitamos.
Capacidad digital
La competencia debe estar en constante desarrollo, ya que la persona debe estar abierta a aprender, a seguir formándose para poder gestionar la incertidumbre, la toma de decisiones y poder adaptarse a las nuevas realidades. Se va a necesitar talento digital en Big Data, Inteligencia Artificial, IOT, Robótica, entre otros.
Experiencias humanas
Si el talento digital está preparado, debe tener un entorno a la altura. Si RRHH debe ser más humano que nunca, el entorno debe ser retador, creativo y que permita las necesidades del equipo, escuchando así sus individuales necesidades. Si antes el cliente era el foco principal, en esta era digital, el cliente interno debe ser nuestra prioridad.
Debemos identificar el talento que nos va a aportar, atraerle y tener las herramientas que harán una experiencia mejor desde el inicio de la relación con la organización. Es el momento de la transparencia, de la diversidad y la comunicación.
Cómo gestionar el talento
Las estrategias deben responder a las necesidades. Hay que conocer dónde está ese talento al que queremos atraer, entender esos canales y estar en ellos. No hay ejecutores, nuestro equipo debe tener autonomía y la suficiente confianza para poder trabajar con las herramientas desde donde les sea posible. Plataformas colaborativas desde donde los equipos puedan ser productivos sin estar juntos.
Hay que generar entornos de participación interna, redes y comunidades donde los empleados puedan compartir y comunicarse, además de recibir novedades de la organización. La flexibilidad ha de ser real y visible.
Visión de organización digital
La cultura está ligada al propósito de la empresa. La gestión del talento debe estar ligada a él y para eso debemos darles alas para el aprendizaje y su propio desarrollo. Para eso es muy recomendable los ecosistemas colaborativos, donde se nutre todo el equipo y el conocimiento y el aprendizaje fluye.
El compromiso de los empleados en la era digital parte de un liderazgo humano. Personas con herramientas digitales que cuidan sus relaciones humanas.
FUENTE: DE MARIBEL GARCIA en el BLOG DE IMF-FORMACION