El Global Startup Ecosystem Ranking ha elegido los veinte mejores ecosistemas emprendedores del mundo. Y la primera posición no es ninguna novedad: Silicon Valley
Cuando hablamos de emprendimiento tecnológico, hay una zona que destaca por encima de todas las demás: Silicon Valley.
Y es que San Francisco y sus alrededores se han convertido, por méritos propios, en la auténtica Meca de cualquier emprendedor tecnológico que se precie. Sin embargo, no es ningún secreto que, desde hace algunos años, casi todos los países desarrollados del mundo quieren tener su propio SIlicon Valley. Para ello, intentan replicar en pocos meses un ecosistema que, no obstante, se ha ido fraguando en el valle californiano a lo largo de un par de décadas.
Pero, puestos a buscar rivales, ¿quiénes son los mejor colocados? ¿Qué otras ciudades del resto del mundo se han ganado el derecho a mirar de reojo al todopoderoso Silicon Valley? Es la pregunta a la que intenta responder elGlobal Startup Ecosystem Ranking, un completo estudio que analiza los mejores ecosistemas emprendedores en función de varios parámetros: el número de startups, las posibilidades de obtener financiación, el nivel de ventas de empresas, etc.
Sin sorpresas: Silicon Valley, a la cabeza
El primer puesto hace tiempo que tiene dueño: Silicon Valley. Pero, ¿quién está detrás? De entrada, todos los inmediatos perseguidores (Nueva York, Los Ángeles y Boston) son americanos. El caso de Nueva York puede no ser demasiado sorprendente, ya que en los últimos años ha venido acogiendo un creciente número de startups –sobre todo del sector fintech– que quieren construir la base de sus negocios en torno al mejor ambiente posible: la Bolsa neoyorquina.
Hay que irse hasta el quinto puesto para encontrar a Tel Aviv, cuya posición en el ranking sorprende si tenemos en cuenta que se trata, de lejos, de la ciudadcuyo país está liderando la innovación en emprendimiento científico y biotecnológico a nivel mundial. No en vano, Israel siempre ha recibido motes como Silicon Wadi o el Silicon Valley de Silicon Valley, en alusión a que su grado de innovación en ocasiones va incluso por delante del de San Francisco.
Ojo, Europa está al acecho
Sin embargo, y pese al claro dominio estadounidense, hay motivos para el optimismo a este otro lado del Atlántico. Y es que, según el Global Startup Ecosystem Ranking, la evolución y el crecimiento de los ecosistemas emprendedores europeos están experimentando un clarísimo auge.
De hecho, los exits (ventas de compañías o desinversiones) en Europa han crecido nada menos que un 314%, muy por encima del crecimiento que observamos en Estados Unidos (46%), Asia (99%) o Latinoamérica, que también está creciendo a un ritmo vertiginoso del 209%.
Barcelona, por delante de Madrid
En lo que se refiere a España, lo cierto es que nuestro país no ha colocado ninguna ciudad entre las 20 mejores del mundo. Sin embargo, y puestos a analizar los datos propios, el ranking sitúa a Barcelona como séptima mejor ciudad emprendedora del continente, por detrás de Tel Aviv, Londres, Berlín, París, Moscú y Amsterdam.
Para encontrar a Madrid tenemos que bajar varios puestos, ya que el Global Startup Ecosystem Ranking sitúa a la capital española a niveles similares a los de otras ciudades europeas como Bruselas, Copenhague, Dublín, Helsinki, Estambul, Jerusalén, Milán, Oslo, Roma o Estocolmo, entre otras.
¿Es necesario irse a Silicon Valley?
Llegados a este punto, quizá convenga hacernos una pregunta que viene siendo recurrente en el mundo del emprendimiento tecnológico en los últimos años: ¿hay que irse a Silicon Valley para emprender? Si montas una startuptecnológica, ¿tienes que irte sí o sí al valle californiano?
Lo cierto es que incluso los que han estado por allí, a pesar de elogiar las inmejorables condiciones de San Francisco, no creen que sea radicalmente obligatorio. Así lo asegura Miguel Ángel Díez Ferreira, CEO de RedKaraoke, que considera que la idoneidad (o no) de Silicon Valley dependerá del sector al que se dedique la startup: «No nos obcequemos con ir a Silicon Valley. A lo mejor tu sitio es Singapur, o Sao Paulo, o Londres, o Berlín… Tienes que elegir el sitio al que vas en función de tus objetivos».
En opiniones similares se mueve Pepe Agell, de Chartboost: «Conozco a muchos emprendedores que han probado a venirse a Silicon Valley, pero han fracasado precisamente por qué no tenían muy claro qué querían de Silicon Valley más allá de la inversión».