Cuántas veces no vemos la cosas porque socialmente las hemos hecho invisibles. Cuánto de esto sabemos todas las personas. Son muchos trabajos, esfuerzos, cuidados, aprendizajes… los que nunca son vistos ni reconocidos. Incluso en algunos casos, con una acción clara de visibilización, gran parte de la sociedad sigue sin reconocerlos. Explicar esta realidad pone en […]

Cuántas veces no vemos la cosas porque socialmente las hemos hecho invisibles. Cuánto de esto sabemos todas las personas. Son muchos trabajos, esfuerzos, cuidados, aprendizajes… los que nunca son vistos ni reconocidos. Incluso en algunos casos, con una acción clara de visibilización, gran parte de la sociedad sigue sin reconocerlos. Explicar esta realidad pone en primera línea al sistema patriarcal neoliberal. Si el mercado no te valora, la ocultación está asegurada incluso en la cobertura de las necesidades más básicas para la vida.

El medio rural sabe mucho de esto. Un montón de problemas acucian al medio rural mostrándolo en ocasiones como absolutamente abandonado pero este mensaje no es del todo cierto. Podemos hablar objetivamente de la despoblación, del abandono: de las inversiones públicas, del de la economía local, de la cultura de la aldea, del patrimonio cultural… pero sin embargo la tierra, el agua, el aire y todos los bienes que ellos generan, entre otros, no se abandonan en ningún caso sino que son apropiados por capital no local. Los frutos de los cuidados ambientales y sociales que producen los habitantes del medio rural tampoco son abandonados sino que son bien aprovechados por las ciudades que resuelven parte de sus problemas de esta manera, lo que no tiene por qué ser un problema si eso generara retornos para quien los produce.

En los pueblos se han creado siempre valores sociales y ambientales que eran parte natural e indispensable de su gestión económica. Estos valores tenían un retorno dentro del mismo ámbito local y en una pequeña parte en el intercambio con las ciudades. Sin embargo, conforme el modelo industrial avanza en el núcleo urbano y en el rural estos valores no cuentan con el retorno de los propietarios del capital que avanzan con la industrialización. Se comportan como si no fueran valores necesarios, al contrario de como actúan ellos y las personas que siguen utilizando estos para cubrir sus necesidades.

El mercado, claramente obsoleto e intervenido, utiliza al medio rural para exportar costes y extraer valores sin retornos. La ecuación económica está incompleta cuando solo habla de la rentabilidad financiera, debe incorporar los valores sociales y ambientales, como se hacía en los pueblos, dentro del modelo económico. Hoy estamos dotados de conocimiento para poder cuantificar y monetizar esos valores y por lo tanto introducirlos en la ecuación sin ningún problema.

¿Por qué no crear empresas que sepan gestionar los tres valores y por lo tanto evitar la exportación de costes y conseguir retornos sobre los valores aportados a la sociedad global?

Se trata de una innovación socioeconómica que se fundamenta en la realidad que ya existió y que a duras penas podemos reconocer hoy en día. Construir sin volver a inventar la rueda aunque aportando innovación para poder adaptar un modelo pasado a una realidad del siglo XXI.

Esta propuesta está en el fundamento de ERESS, ciclo formativo y de convivencia para el emprendimiento social en el mundo rural, que propone crear empresas sociales que consigan generar retornos sobre todos los valores que el medio rural aporta. Es una propuesta de revitalización económica y social de los pueblos, de reversión del abandono económico al modelo de la nueva aldea que es el más sostenible. Es más, es una propuesta de solución a problemas urbanos desde la solución a problemas rurales. No existe contraposición entre ambos medios sino al contrario la cooperación es la única vía de solución a los grandes problemas del siglo como el cambio climático, la perdida de la biodiversidad o la desigualdad.

ERESS abre la posibilidad para que cualquier persona que quiera emprender de esta manera encuentre conocimiento, acompañamiento, red y apoyo para convertir la idea en realidad. En encontramos la propuesta concreta a la que nos podemos sumar para crear un movimiento que consiga introducir los tres valores en una sola ecuación, provocando con ello el cambio del modelo económico.

 


 

  FUENTE  y AGRADECIMIENTOS  :    ECONOMÍA SOLIDARIA

  Puedes ver + en este enlace  :    https://www.economiasolidaria.org/noticias/reas-pais-valencia-xarxa-deconomia-alternativa-i-solidaria-noticias-el-medio-rural-motor-del-cambio/