Como seres humanos, somos relacionales, necesitamos de la relaciones sociales para avanzar, convivir, aprender y desarrollarnos. Así, el trabajo ha evolucionado a grandes pasos y, en esta economía más social, cada vez necesitamos de más contactos e interacciones. A todo esto, Internet ha venido a revolucionar estos cimientos, facilitando esa labor relacional.
En este cambio brusco de la sociedad, dónde hay trabajo pero, debido a la reducción de plantillas y a las externalizaciones, hay menos empleo, el coworking ha venido a significar un punto de inflexión para los aventureros que inician su andadura en negocios nuevos, autónomos audaces y pymes atrevidas. Ha venido a facilitar el engorroso camino de iniciar un nuevo proyecto.
El coworking, o cotrabajo en español, es una manera de trabajar que permite que varios profesionales independientes, de sectores distintos, compartan una misma oficina o un mismo espacio de trabajo, dónde se fomenta la colaboración, el trabajo en un espacio comunitario y multidisciplinario y ampliar la red de contactos (networking). Para que todo el mundo me comprenda: profesionales de diferentes sectores, autónomos, emprendedores y empresarios, comparten el mismo espacio, tanto físico como virtual para trabajar en sus propios proyectos, como alternativa a la soledad que implica trabajar desde casa, así como fomentar proyectos conjuntos.
Un buen profesional necesita un portátil, un teléfono y una buena conexión a Internet entonces ¿por qué no compartir un espacio físico con otros profesionales para ABARATAR COSTES y FOMENTAR EL TRABAJO COLABORATIVO?. Esa es la cuestión formar parte de una COMUNIDAD.
No sólo se trata de compartir gastos de luz, alquiler, Internet o pagar una cuota por formar parte del grupo, sino de aprovechar las sinergias que se puedan crear entre los participantes, COLABORAR, INTERCAMBIAR EXPERIENCIAS, CONSEGUIR CONTACTOS, TENER UN SITIO DÓNDE TRABAJAR EN TU PROYECTO Y, A LA VEZ, INTERACTUAR EN EL DE LOS DEMÁS.
Normalmente, un gestor dinamiza y procura la cordialidad y la colaboración entre los participantes de ese espacio de trabajo colaborativo, para un buen ambiente y desempeño.
Desde que en 2006 abriera sus puertas en San Francisco el primer espacio coworking, se han multiplicado por el mundo y, aunque en Estados Unidos es una tendencia muy popular, empieza a ganar adeptos en toda Europa.
España ocupa el tercer lugar en el ranking mundial de países con más espacios coworking, tras EEUU y Alemania. En esta web tenéis los espacios coworking registrados en España: (http://coworkingspain.es/espacios) y DeskWanted es el primer buscador de espacios coworking en la red.
De las ventajas del coworking puedo destacar:
- ROMPER CON LA SOLEDAD DE TU CASA. ALTERNATIVA ECONÓMICA
- MÁS INTERACCIONES.
- MEJORES REDES. INTERCAMBIO DE EXPERIENCIAS, CONTACTOS.
- FLEXIBILIDAD DE USO
- SUPONE UN ESPACIO PROPIO
- De los inconvenientes, podría destacar:
- MAYOR DESEMBOLSO QUE SI CONTINUAS EN TU CASA.
- SI NECESITAR INTIMIDAD O CONCENTRACIÓN, NO ESTÁN ASEGURADOS.
- NO HAY SECRETOS, PIERDES PRIVACIDAD.
Personalmente, a parte de la facilidad de tener un sitio dónde desempeñar tu tarea, abaratando costes, lo que más me gusta del Coworking es que fomenta la vida social y nos facilita que estemos en contacto con el mundo. Creo que dentro de poco, el coworking será un referente dentro de los modelos de trabajo.
Con respecto a los precios hay de todo, por horas, bonos, por días, etc., siempre ajustándose a las posibilidades de las personas interesadas. Suelen ser muy económicos en España.
A lo largo del 2014, y a buen seguro que también en el 2015, habrá, en el territorio nacional, muchas actividad, conferencias y encuentros relacionados con el coworking, para que se conozca mejor y para que se compruebe que es una ALTERNATIVA MUY REAL Y FACTIBLE PARA LABRARSE UN FUTURO.
FUENTE: http://www.portalparados.es/
