Dominar la tecnología a través del manejo de herramientas informáticas se ha convertido en un requisito fundamental para acceder a gran parte del mercado laboral. Ya no sólo es una competencia reservada a programadores, técnicos informáticos u otros puestos de perfiles tecnológicos, sino que se extiende a una gran parte de las vacantes de empleo actuales.
Intercambiar información, redactar informes, diseñar, contabilizar, hacer pedidos…son sólo algunos ejemplos de tareas diarias relacionadas con diversas áreas de trabajo que requieren de conocimientos informáticos específicos. El mundo evoluciona, y con él, los puestos de trabajo, por lo que estar al día de herramientas que facilitan y posibilitan las funciones ocupacionales son imprescindibles para la inserción laboral.
En este sentido, es de suma importancia detallar en el CV nuestros conocimientos tecnológicos, para poder ser valorados en procesos de selección. No basta con indicarlos, sino que es recomendable seguir una serie de consejos sobre cómo incluirlos y estructurarlos.
1. Clasificar por áreas.
Son muchas las aplicaciones y programas que se pueden dominar desde el punto de vista de la informática. Por ello, la forma más sencilla de que este tipo de información quede bien organizada en el CV es clasificarla en grupos específicos.
Algunos ejemplos serían:
Agrupar las herramientas y programas correspondientes a Ofimática (Correo electrónico, procesadores de texto, hojas de cálculo…etc.).
Hacer otro apartado con Bases de Datos si se dominan programas como Oracle, Datawarehouse, Server, Microsoft Access.
Igualmente, reservar un apartado para Diseño, incluyendo el dominio de programas informáticos como Adobe Dreamweaver, Adobe Flash, Photoshop, QuarkXpress, Adobe InDesign, Adobe Illustrator, o Premiere Pro.
Otras opciones podrían ser, Redes Sociales, Herramientas Colaborativas, Paquetes Estadísticos, plataformas de gestión administrativa… todo dependerá de tu perfil profesional.
2. Indicar el nivel de conocimiento
Para que el reclutador se pueda hacer una idea exacta del dominio de estas aplicaciones y programas informáticos, es fundamental indicar en el currículum el nivel de conocimiento de las mismas.
La clasificación más recomendada incluye el nivel experto (cuando se domina el programa a la perfección), el nivel profesional (cuando es posible desenvolverse con soltura y solucionado problemas), el nivel usuario avanzado (cuando se maneja el programa y se puede dar solución a incidentes leves).
Y el último nivel sería el de usuario, que se emplearía cuando se tienen los conocimientos básicos del programa pero no se está preparado para resolver ningún tipo de incidencia.
3. Detallar si se poseen certificados o diplomas
Muchas habilidades informáticas se adquieren a través de cursos de formación específicos, mientras que otras, sin embargo, se aprenden de forma autodidacta. Por ello, no está de más indicar en el currículum si se cuenta con algún certificado que pueda acreditar el dominio de un determinado programa o aplicación informática concreta.
4. Información clara y esquemática
Siguiendo las pautas de la agrupación por áreas así como de los niveles de especialización, la información quedará bien estructurada, facilitando así la lectura y la comprensión de cuáles y cómo son nuestras habilidades informáticas. Todo ello añadirá valor a nuestro CV y, por tanto, nos hará más competitivos en procesos y entrevistas de selección.
FUENTE: PORTALEMPLEO UNIVERSIDAD DE SEVILLA
VER + EN: http://portalvirtualempleo.us.es/conocimientos-informaticos-como-incluirlos-en-el-cv/
Imagen de Gerd Altmann en Pixaba