Los seis perfiles profesionales que explican las nuevas necesidades tecnológicas

Los perfiles profesionales están en constante evolución y adaptarse a ellos supone un reto y una oportunidad para las empresas en un mundo cada vez más moldeado por las peculiaridades regionales, la pandemia y las nuevas formas de trabajar. Seis perfiles clave conforman el nuevo escenario, según un reciente informe de Poly, empresa creadora de productos audiovisuales.

Identificar los atributos, puntos débiles e intensidades comunicativas asociadas a cada uno de esos perfiles, es la clave para adaptar los dispositivos y tecnologías existentes en la empresa a los estilos de trabajo y los comportamientos de la plantilla. Como explica Jennifer Adams, responsable sénior de experiencia de venta y capacitación de Poly, hacerlo ayudará a maximizar la eficiencia y productividad, dos factores “clave para contar con una plantilla eficaz y exitosa, tanto ahora como en los próximos años».

Los seis perfiles, que sumados representan el 92% de una empresa típica, presentan unos rasgos de carácter diferenciados. Y el 8% restante se encuadra en el perfil de trabajador independiente de la oficina, es decir, aquellas personas que desempeñan funciones autónomas y apenas necesitan hacer uso de las tecnologías de comunicación y colaboración.

Atributos, puntos débiles e intensidades comunicativas asociadas a cada perfil

• Colaborador de oficina. Este perfil suele representar la mayor proporción de la mano de obra (27%) de las empresas. Se caracteriza por ser altamente colaborativo y se siente muy cómodo con las nuevas tecnologías. Pero, al trabajar habitualmente en espacios abiertos, tiene que lidiar con los ruidos de fondo y las constantes interrupciones, así como con la necesidad de gestionar su comunicación de forma fluida a través de distintos dispositivos.
• Trabajador flexible. Con una rutina que implica dividir su tiempo entre la oficina, el teletrabajo y los viajes, un 20% de los empleados son ahora trabajadores flexibles que no dejan de innovar y adaptar sus canales de comunicación debido a la frecuencia con que se conectan en remoto y en movimiento. Entre los distintos riesgos que afrontan se encuentra tener dificultades para colaborar con sus colegas y perderse información importante en la oficina. Por ello, deben permanecer siempre conectados y comunicarse a través de varios dispositivos para minimizar este riesgo.
• Trabajador remoto. En las empresas de hoy en día, el 15% del personal está en este segmento. Se trata de un perfil que se conecta principalmente desde su casa y que, por eso, ve reducida su posibilidad de celebrar reuniones en persona. Esto los enfrenta al reto de incrementar la eficiencia y productividad de la colaboración en remoto y, por lo tanto, hace que sea fundamental dotarlos de múltiples dispositivos, sistemas de comunicaciones unificadas y tecnologías que faciliten la comunicación a distancia.
• Comunicador de oficina. Los comunicadores de oficina se sienten más cómodos utilizando sistemas y dispositivos que conocen, como los teléfonos de escritorio. Representan el 13% de la plantilla y entre las principales dificultades a las que se enfrentan están las distracciones causadas por interrupciones, el ruido de fondo y la falta de privacidad en las llamadas.
• Directivo conectado. Estos impulsores del negocio y amantes de la tecnología constituyen un 12% de una plantilla típica. Acuden donde haga falta para tomar decisiones y resolver problemas. Debido a su estilo de trabajo versátil, utilizan más herramientas de comunicación que cualquier otro perfil. Sus puntos débiles son las distracciones, las interrupciones y el ruido de fondo imprevisible, ya que necesitan estar conectados en todo momento y mediante toda clase de dispositivos.
• Rey del asfalto. Hay un 5% de la plantilla siempre en movimiento, hasta el punto de que pasa más de la mitad de su tiempo trabajando fuera de la oficina. Estos perfiles necesitan soluciones muy portátiles y fáciles de usar, que eliminen el ruido y reduzcan la posibilidad de pérdida de fiabilidad de las conexiones. Seguramente algunos seguirán necesitando viajar ocasionalmente para llevar a cabo aquellas tareas empresariales que precisan de contacto personal.