La rentabilidad de las organizaciones reside principalmente en su productividad y eficiencia, es decir, maximizar la producción minimizando los recursos empleados o, lo que es lo mismo, maximizar el rendimiento con el mínimo coste y en el menor tiempo posible, algo que es imposible de conseguir sin una adecuada política de Recursos Humanos.
La correcta gestión y dirección de las personas de una empresa es, por lo tanto, un factor diferenciador en el éxito de cualquier organización.
Al igual que en los equipos de futbol el entrenador es una pieza clave para el éxito del equipo, las empresas buscan líderes, los cuales tienen que apoyarse en los departamentos de Recursos Humanos para todos juntos optimizar la producción, en un contexto en el que todas las partes se encuentren satisfechas.
En la gestión y dirección de personas hay 7 pilares que pueden catapultar a la organización al éxito, que te puede interesar conocer.
Transformación digital aplicada a los RR.HH.
La transformación digital está generando un nuevo perfil de empresas 4.0 en las cuales el valor añadido que aporta el trabajador pesa más que las horas que este pasa sentado frente a una máquina o un ordenador. No podemos pensar en competir con las máquinas en determinados aspectos, por lo que en lugar de empeñarnos en competir con ellas debemos apoyarnos en la tecnología para generar mayor valor añadido a la organización y en menos tiempo.
Selección de personal
Redes sociales como LinkedIn están provocando un cambio de modelo en la selección de personal, de manera que se está cambiando de un modelo de selección pasiva a la selección activa, en el que reclutadores y candidatos interactúan en las redes sociales. Las redes sociales como LinkedIn constituyen una oportunidad para la selección de candidatos pasivos, es decir, aquellos que no se encuentran en búsqueda activa de empleo, siendo esta una práctica más habitual en la selección de perfiles directivos o tecnológicos.
Formación
La formación es uno de los factores más determinantes del éxito de las organizaciones, ya que los empleados tienen que adaptarse constantemente a nuevos cambios tecnológicos y productivos. Una buena formación hace que las cosas difíciles parezcan fáciles. Una empresa en la que sus empleados dejan de formarse pone en marcha la cuenta atrás para su extinción.
Habilidades y competencias directivas
Los directivos tienen que liderar a sus equipos, bien sean estos presenciales o trabajen remotamente, algo que supone un cambio de rol importante. Las estructuras de muchas empresas también están cambiando y son cada vez más horizontales, de manera que los directivos tienen que formarse para adquirir nuevas habilidades y competencias directivas, ya que no se pueden usar las mismas que hace 20 años.
Seguridad
El plan de prevención de riesgos laborales es obligatorio para cualquier empresa o empresario que cuente con uno o más trabajadores a su cargo. La siniestralidad laboral en España es un grave problema que causa todos los años la pérdida de vidas humanas y también de muchas horas de trabajo como consecuencia de bajas laborales que podrían haberse evitado con una correcta prevención de riesgos laborales. La seguridad de los trabajadores debe anteponerse sobre todas las cosas, ya que las consecuencias de un accidente grave pueden ser irreparables para el trabajador y colateralmente socavan la moral y la productividad de los compañeros de trabajo, que se pueden sentir desmotivados pensando que el accidente de un compañero podían haberlo tenido ellos y que podía haberse evitado.
Valoración de puestos de trabajo
La correcta valoración de los puestos de trabajo es otro factor clave, ya que de ella dependen dos elementos determinantes del éxito de la organización: la productividad y la motivación de los trabajadores. La valoración de los puestos es una tarea que se realiza conjuntamente con el análisis y la descripción de los puestos de trabajo, con el objetivo de determinar las tareas a realizar, la función del puesto, responsabilidades, remuneración, planes de carrera y ventajas sociales.
Comunicación interna
Una buena comunicación es como un pegamento que todo lo une, pero una mala comunicación puede ser como un cuchillo que separa a las partes. Los directivos y responsables de personal deben procurar que exista una comunicación fluida y sincera, bien sea personalmente o digitalmente, mediante email o mediante la utilización de mensajería interna.
Con el objeto de formar especialistas en la gestión de las personas dentro de las organizaciones, aportando para ello los métodos para la planificación, gestión y desarrollo de los Recursos Humanos en su dimensión psicológica, jurídica y empresarial, el CEF.- ha preparado para todos aquellos interesados el Máster en Dirección y Gestión de Recursos Humanos – RR. HH.
AUTOR: José Ramón Fernández de la Cigoña Fraga
FUENTE: vía @ClubLaboral