Desde hace algún tiempo venimos escuchando reflexiones sobre transformación tecnológica, transformación digital, procesos de digitalización empresarial, etc.

Sin embargo pocos profesionales son conscientes de su verdadera dimensión y alcance.

La transformación tecnológica en la empresa no consiste sólo en trabajar con nuevas herramientas tecnológicas, digitales o nuevas tecnologías, al servicio de las personas y no al contrario.

La idea primaria es construir unos cimientos sólidos y estables donde se apoyará y descansará la nueva empresa tecnológica.

Debemos preparar la empresa para su adaptación a las nuevas tecnologías, de una forma efectiva, rápida y fácil.

La transformación tecnológica será profunda y afectará a los procesos, los sistemas, la cultura, las personas, la estructura…

En realidad la transformación afectará a nuestro modelo de negocio. Quien no lo vea así tiene un problema.

Actualmente son muchas las empresas que están embarcadas en procesos de transformación digital y este momento de transformación tecnológica desemboca en nuevas oportunidades de empleo.

En España el 34% de las empresas que automatizarán procesos, en los próximos dos años, generarán más empleo.

Al mismo tiempo si la empresa es capaz de entender esta transformación del talento como una oportunidad tendrá mucho ganado.

Por eso, el 71% de las empresas planean mejorar la cualificación de sus profesionales, creando así su nuevo talento.

Invertir en la formación de su equipo, mejorar la retribución y definir modelos alternativos de contratación son algunas de estas buenas prácticas.

Sin embargo insisto, implementar con éxito nuevas herramientas en una organización no es cuestión de inversión o formación en el uso de ellas.

La empresa debe estar preparada, su cultura debe estar orientada hacia la innovación.

Los líderes deben inspirar y dirigir la transformación tecnológica.

Las personas deben estar sensibilizadas, motivadas, comprometidas y preparadas para asumir este desafío.

No se trata pues de un cambio, sino de un proceso más amplio y profundo que implica una transformación integral de toda la empresa.

Para afrontar la transformación tecnológica y tener éxito son necesarios muchos cambios.

Transformar la cultura empresarial, su estructura, sus líderes y las personas conforma la hoja de ruta de este proceso de cambio.

Estratégicamente es importante revisar o diseñar una nueva forma de entender la empresa.

  • La creatividad y la innovación como elementos fundamentales de la misión, visión y valores de la empresa.
  • Aspectos que debemos incorporar a los hábitos de trabajo,
  • asumir riesgos, compartir el conocimiento,
  • fomentar la participación y la aportación de ideas son ideas necesarias.

La estructura es un factor determinante de la fortaleza y debilidad de la empresa en la transformación tecnológica.

  • analizar el organigrama, las áreas funcionales, las responsabilidades actuales y de futuro,
  • estudiar los puestos actuales y definir las necesidades futuras.
  • una correcta, equilibrada y lógica distribución de funciones,
  • el conocimiento y capacitación por las personas que deben asumirlas

Asegurar la eficacia y disminuir el rechazo por imposición o desconocimiento, incertidumbre o incompetencia es primordial.

La dirección, los gestores y los líderes deben convertirse en los verdaderos inspiradores de la transformación tecnológica y digital.

  • Organos de gobierno y gestión adecuados.
  • Planificar, implementar y supervisar el proceso.
  • Tener pensamiento asociativo, capacidad para cuestionarse y cuestionarlo todo.
  • ser un gran observador, generar amplias redes de personas diferentes y ser un gran experimentador.

Son las señas de identidad y las competencias necesarias para liderar de forma innovadora e inspiradora la transformación.

Y añadiría algunas otras que me parecen importantes para la transformación tecnológica:

  • la visión estratégica y global
  • el pensamiento divergente,
  • la curiosidad y las ganas continuas de aprender lo nuevo,
  • la capacidad de comunicación impactante y emocional
  • el pensamiento positivo y la inteligencia emocional,
  • el afán alimentador del grupo,
  • energía y pasión
Finalmente añadiría el componente ético y humanista del liderazgo en toda transformación tecnológica:
  • Honestidad
  • colaboración
  • y vocación de servicio.

 

Y, como hemos resaltado al principio, la gestión del talento que no debemos descuidar, desplegando nuevas competencias para el uso de las nuevas tecnologías y la gestión de las nuevas formas de entender la empresa.

Preparar a nuestros empleados, emocional y psicológicamente, para esta transformación es importante.

  • abrir sus mentes
  • desarrollar su pensamiento lateral,
  • la capacidad innovadora
  • y… trabajar en un mundo globalizado y tecnológico

Para conseguir esta transformación tecnológica son necesarias herramientas de gestión y desarrollo empresarial, profesional y personal que desde AZC Global ponemos a disposición de las empresas.

 

 


 

AUTOR: Enrique Martínez Bermejo

FUENTE: FORO RECURSOS HUMANOS

VER + EN: https://www.fororecursoshumanos.com/transformacion-tecnologica-empresas/

 

Imagen de Gerd Altmann en Pixabay

 


 

Mira que artículos te he preparado para que vuelvas a leer…!!!!