¡Prepárate para las nuevas entrevistas de trabajo!

El objetivo de las empresas y organizaciones es seleccionar a las personas más adecuadas para cada puesto, para lo que utilizan diferentes tipos de pruebas, siendo una de las más importantes la entrevista de trabajo. La profunda transformación del mercado laboral de los últimos años, ha propiciado que, junto a las entrevistas “tradicionales” se hayan ido incorporando nuevas formas y métodos, con contenidos y desarrollo más innovadores, que tratan de «marcar la diferencia» e ir un paso más allá de lo reflejado en el currículum de candidatos/as, para valorar y comprobar de un modo más práctico y directo la realidad de habilidades y competencias que se consideran necesarias para acceder a dichos puestos. Si sabemos cuáles son estas novedosas fórmulas, podremos prepararnos y afrontar el proceso con más posibilidades de éxito.

Como ya comentábamos en un blog anterior, dedicado a las nuevas formas de atraer talento en las empresas, éstas han tenido que reinventar sus procesos de selección, para encontrar y contratar a las personas con los perfiles más adecuados a sus necesidades. Así, por una parte, las empresas deben resultar atractivas para que los y las profesionales quieran incorporarse a ellas  y, por otra parte, deben asegurarse de que esas personas reúnen las aptitudes y actitudes que el puesto y la empresa requieren.

En ocasiones, la novedad está en la forma, estructura y/o escenario de la propia entrevista, que busca la originalidad, la creatividad y la sorpresa, incluso tomando ideas de otros sectores ajenos al mundo laboral, y en otros casos, en el contenido, que no se limite a  una mera sucesión de preguntas y respuestas acerca del currículum que refleja los conocimientos, experiencias, habilidades y logros de la persona candidata al puesto. Éstas son las tendencias más actuales en materia de entrevistas:

1. Castings o audiciones laborales, siguiendo el modelo empleado en el mundo artístico o de la interpretación. Se cita a todas las personas candidatas y se les pide que «actúen» en una situación determinada, o que en un tiempo establecido «vendan sus talentos» para el puesto, y el público está compuesto por el departamento de Recursos Humanos de una empresa o las personas que lleven a cabo el proceso de selección, que deberán «elegir». También puede emplearse la técnica de realizar varias «microentrevistas» rápidas con varios/as entrevistadores/as. El objetivo es aumentar la fiabilidad del proceso y conocer mejor a cada participante.

2. Entrevistas, desafíos grupales y/o dinámicas de grupo, cada vez más habituales, por la posibilidad de interactuar con otros/as candidatos/as, lo que permite a quien selecciona analizar y valorar su comportamiento, habilidades personales, sociales y de comunicación que se consideren necesarias para cada puesto.

3. Gamificación, a través de distintos juegos y desafíos. Las posibilidades son muy variadas (videojuegos, juegos de mesa, escape room,…etc).y es una opción muy utilizada en los procesos de selección, al facilitar que las personas, de una forma lúdica, más relajada y divertida, puedan poner en práctica diversas destrezas y habilidades que cada juego requiere. Para ello se fija un reto o meta, unas normas o reglas de juego y el premio o recompensa que se obtendrá al lograrlo. Los juegos pueden ser tanto individuales como colectivos, en función de las competencias que se pretenda valorar en relación al puesto (liderazgo, trabajo en equipo, capacidad analítica, persuasión, resolución de problemas,…).

4. Simulaciones de entornos profesionales o juegos de rol. Pueden plantearte simular situaciones habituales o hipotéticas en tu entorno profesional o, por el contrario, situaciones extremas o excepcionales, para saber tu capacidad de reaccionar ante imprevistos, tu forma de enfrentarte a los problemas o tu gestión del estrés, por ejemplo.

5. Entrevistas telefónicas y videoentrevistas (a través de Skype o WeChat). La tecnología permite evitar gastos y desplazamientos innecesarios, por lo que esta forma de realizar entrevistas es muy frecuente. En ellas, hay que cuidar especialmente el aspecto técnico y las habilidades de comunicación.

6. Entrevistas en entornos y situaciones informales, en espacios no laborales, como en un restaurante, durante una comida o cena. La entrevista se desarrolla de un modo más distendido y facilita la valoración de otros aspectos que pueden resultar importantes en el desempeño de algunas actividades laborales. No olvides que debes cuidar especialmente la comunicación verbal y no verbal y recordar que, pese a la informalidad, se trata de una entrevista de trabajo, dentro de un proceso de selección.

Junto al proceso de preparación habitual que debemos seguir para preparar cualquier entrevista, que pasa por conocer y utilizar bien las herramientas que como candidatos/as tenemos, así como aquellas de las que disponen las empresas, hay que tener en cuenta una serie de recomendaciones útiles para adaptarnos a estas nuevas fórmulas, que pueden ayudarnos a afrontarlas y realizarlas con más posibilidades de éxito.

• Reflexiona y revisa tu currículum a fondo; elabora un currículum por competencias y asegúrate de que lo que reflejes en él puedas demostrarlo de un modo práctico. Para superar estas pruebas, es imprescindible conocerse muy bien, tener claro lo que sabemos hacer, nuestros puntos fuertes y débiles, lo que necesitan las empresas y lo que requiere el puesto al que se opta. Prepárate posibles preguntas para la entrevista.
• Recuerda que, aunque los conocimientos académicos y técnicos son muy importantes y necesarios, sobre todo van a valorarse las competencias transversales. inteligencia emocional, comunicación, lenguaje, habilidades sociales,… Trabaja especialmente la creatividad y practica y mejora tu capacidad para hablar bien en público.
• Prepara un «discurso» corto para presentarte, que resuma brevemente lo que sabes hacer y lo que puedes aportar a la empresa. Aprende a vender tus talentos laborales.
• En las entrevistas que se realicen a través del teléfono o por videoconferencia, es imprescindible revisar previamente los medios técnicos que van a utilizarse y practicar hasta adquirir soltura. También es importante elegir un entorno y un ambiente adecuados, sin ruidos ni interrupciones externas.
• Mejora tus competencias digitales.
• ¡Juega!: practica diferentes tipos de juego, retos y desafíos. En las ferias de empleo es habitual que se lleven a cabo procesos de selección y experiencias de «gamificación».
• Infórmate a fondo sobre la empresa y el puesto.